sábado, 8 de junio de 2013

BUSCAR, Y ENCONTRAR EL SENTIDO DE LA VIDA





BUSCAR, Y ENCONTRAR  EL SENTIDO DE LA VIDA


©Giuseppe Isgró C.



Una persona que se formula los planteamientos sobre las insatisfacciones de la vida, denota ser de un estado lúcido de conciencia. Que no trata de engañarse buscando excusas, sino de encontrarle un mejor sentido, aún, a la vida.

Se vive en un mundo donde, sin un conocimiento amplio de las leyes que rigen la vida, y de determinados conocimientos que trasciendan los límites de lo tradicional, se corre el riesgo de llegar a una etapa intermedia de la existencia con estados significativos de insatisfacción o descontento.

En esos estados de insatisfacción interior es donde se hace presente la acción pedagógica de Dios, dentro de la conciencia, hurgando en lo más íntimo del ser, para reorientar esa vida hacia el camino en el cual rige el plan que el mismo Dios estableciera, desde el inicio de los tiempos, para ese ser.

El estado de insatisfacción interior que se experimenta, ocasionalmente, es una de las cosas más maravillosa que le puede ocurrir a una persona, en un momento dado.

Se trata de un mecanismo extraordinario que Dios colocó dentro de cada ser –en los cuatro reinos naturales- para que no esté jamás totalmente satisfecho, para evitar que cada individuo se estanque. Con esto se asegura de que nadie jamás deje de progresar.

Hay que transmutar ese sentimiento interior de insatisfacción con nuevos objetivos exteriores, integrales de vida, que canalicen la fuerza creadora interna, en constante producción, hacia esas nuevas actividades que se correspondan con el auténtico plan de vida, que cada quien elaboró antes de nacer a este ciclo de vida, en la dimensión espiritual, que le aportan el sentimiento de auto-realización que anhela.

Dado que cada quien se encuentra, en un dado momento, en una fase intensa de realización, dentro de su plan de vida, esos sentimientos de insatisfacción son señales de alerta que el propio espíritu transmite a la conciencia, con el fin de que se emprenda una búsqueda que le conduzca al cumplimiento de la propia misión de vida.

El primer paso es aceptar la realidad tal como se presenta, y no evadirla. Al hacerlo con valentía, estará afrontando la realidad y brindando el apoyo necesario a todos los miembros del propio círculo familiar que lo precisan.

Esa es parte de la propia misión, y seguramente, del compromiso que cada quien adquirió antes de nacer, con cada uno de los miembros de su familia, de ayudarle a superar sus pruebas, por ser, evidentemente, un Espíritu más fuerte, o experimentado.

Allí está la oportunidad de crecimiento espiritual, en seguir brindando la ayuda a cada miembro de la propia familia.

Nadie podría, probablemente, ni siquiera imaginar lo que podrán hacer esas personas valiosas a quien se asiste, ahora,  por sus cooperadores, en el futuro. Porque la vida es una rueda que gira. Hoy se ayuda, mañana se será ayudados por esos mismos seres, ya que somos integrantes de una familia espiritual que vuelven a nacer juntos una y otra vez, para apoyarse en ese largo –eterno- camino de progreso sin límites en el eterno retorno del ser individual al ser universal.

Al término de este ciclo de vida, en la dimensión espiritual, la felicidad de los integrantes de una familia será inmensa, al observar culminadas con éxito las pruebas existenciales. Todos estarán  verdaderamente felices por haberse apoyado, y haber superado juntos los retos que se habían antepuestos como objetivos de aprendizaje.

Todo lo que se avanza en este ciclo de vida, todas las pruebas que se superan ahora, constituyen un trabajo menos que habrá que llevar a cabo mañana. Es tiempo ganado, aunque ahora pareciera tiempo perdido. Es el ejercicio para adquirir la fortaleza suficiente que requeriremos el día de mañana, en el tiempo perfecto, y siempre en presente, de Dios.

Es preciso expresar constantemente la gratitud al Gran Ser Supremo, como si las pruebas que se afrontan estuviesen ya superadas satisfactoriamente. Algo así: -Gracias Creador Universal, porque esta situación, en tus planes cósmicos, ya está resuelta-.

Sidharta Gautama, -Buda, o el iluminado-, quinientos años antes de nuestra era, tuvo percepción de esta realidad con una lucidez impresionante. En el primer mensaje dado a sus discípulos, en el Parque de los Ciervos, le dijo que la vida es sufrimiento, -o, como a nosotros nos gusta denominarle: INSATISFACCIÓN. El significado del término pali: “dukka”, que usó Sakyamuni significa, precisamente: insatisfacción.

Sakyamuni, -Sidharta Gautama-, en las Cuatro Nobles Verdades sostenía que la insatisfacción es producida por los deseos en su polaridad negativa.

Que es posible transmutar la causa de la insatisfacción, para que cese la misma.

Y, según él, la forma de transmutar esa causa que produce la insatisfacción es la de regir la propia vida aplicando las enseñanzas del Noble Sendero Óctuple, cuyas fases son: 1) Rectas opiniones; 2) Rectos propósitos; 3) Rectas palabras; 4) Rectas acciones; 5) Rectos medios de sustentamiento de vida; 6) Rectos esfuerzos; 7) Recta atención; y, 8) Recta concentración.

1)     RECTAS OPINIONES:

Para emitir rectas opiniones de requiere tomar decisiones acertadas, eligiendo entre diversos puntos de vista, el que mejor exprese el justo sentido del tema sobre el que se emite el juicio.

Empero, para tomar decisiones acertadas, es preciso tener el conocimiento adecuado, necesario y suficiente, lo cual implica una búsqueda y un estudio constante de la Doctrina Universal, es decir: todas las corrientes válidas de pensamiento y las obras de los más importantes pensadores de todos los tiempos, por ejemplo:

Homero, -el maestro de Alejandro Magno, por la lectura de sus obras la Ilíada y la Odisea, las cuales se las sabía de memoria-; le facilitaron el desarrollo de su visión de líder y a adquirir un amplio dominio de los valores universales. Además,  el gran macedonio, en forma presencial, tuvo por instructor  a Aristóteles. El estagirita le ayudó a forjar su pensamiento de estadista, en cuyas funciones el discípulo descolló con efectividad, difundiendo la cultura helénica, fomentando el cruce étnico entre los griegos y los pueblos conquistados, ya que obligaba a sus hombres a casarse con las mujeres, en vez de tomarlas como esclavas, entre un sinnúmero de aspectos  geopolíticos más.

También, es preciso incluir entre los autores de obligada lectura, a: Platón, el mayor filósofo de todos los tiempos; Plutarco, el maestro de Queronea, otro de los grandes griegos que más ha influido en la formación de los líderes a partir del siglo II de nuestra era. Séneca, Cicerón y Plotino, son mentes lúcidas cuyas obras ayudan a forjar una óptima visión de la vida. Cervantes, con el Quijote y las Novelas Ejemplares, constituye un maestro para todos los tiempos. Napoleón Hill, con su obra: PIENSE Y HÁGASE RICO, ha cambiado la vida de millones de personas en todo el mundo. Pero, no se vaya a pensar que éste es un libro que trata solamente de la riqueza material. Hay otras clases de riquezas donde la material es irrelevante, aunque necesaria y valiosa, y esa obra extraordinaria ayuda a percibirlas.

Al término de cada ciclo de vida, la mayor riqueza que cada quien se lleva consigo es todo el bien que realiza. El bien que se ha efectuado es el único del cual derivará bendiciones y compensaciones, y cuyo saldo conformará la propia SUMA EXISTENCIAL.

Esa suma existencial le ubicará, o reubicará en su nuevo orden de vida.

Ese orden de vida donde podrá seguir sirviendo en los planes de Dios, cumpliendo su voluntad, constituye la mayor riqueza, ya que permitirá expresar los propios estados de conciencia, en la realización de los objetivos asumidos en la gran obra universal, en la cual, a cada quien, le toca  cooperar, sin excepción. Es una cooperación voluntaria, regida por el mecanismo de las necesidades, de los deseos, de las propias aspiraciones y ambiciones personales, y por los valores universales, soportes de la sabiduría de la ley cósmica impresa en la conciencia de cada ser, en los cuatro reinos naturales.

Pero, se recibe, en cambio, el Salario Cósmico, justo y perfecto, ya que el pagador, que es Dios, es la expresión perfecta de la justicia.

Siempre paga, por la ley cósmica, de acuerdo al propio merecimiento. Luego, en forma inmediata asigna, a cada quien, la obra que sigue en sus planes universales, y en los que trazó para cada ser.

Pitaco, uno de los siete sabios griegos, en cierta ocasión en que todos se afanaban para salvar sus cosas personales, recibió esta pregunta de un amigo: -“Y tú no vas a salvar tus cosas?

-Pitaco, le respondió: -“Todo lo llevo conmigo”.

Esas son las únicas riquezas que valen: Conocimiento, experiencia, virtudes, buena voluntad, capacidad de dar, -y de recibir-, amor, sentido de lo justo, fortaleza, templanza, autodominio, lucidez mental, o visión, tolerancia, capacidad de perdonar, -y de auto-perdonarse-, amistad, y un largo etcétera de valores intangibles físicamente, pero no menos tangibles espiritualmente.

2)     RECTOS PROPÓSITOS:

 La vida de Bolívar se transformó desde el mismo instante en que se forjó el propósito de libertar a Latinoamérica del dominio español, en el Monte Sacro, en Roma, donde se encontraba en compañía de su maestro: Simón Rodríguez.

Años después, Simón Rodríguez diría, refiriéndose a Bolívar: -“Y el chaval cumplió su palabra”.

Es preciso forjarse claros propósitos de vida y nuevos objetivos a corto, mediano y largo plazo, por escrito, en todos los ámbitos existenciales.

Ejercicio de gratitud: Hay que expresar gratitud a la vida, y a Dios, en todo momento.

Anotar, ahora, en una hoja de papel, por lo menos cien cosas buenas por las cuales cada quien pueda expresar gratitud a Dios y a la vida.

Se sorprenderá, cada persona, como a medida que va escribiendo, le van surgiendo en la propia mente, mayor número de motivos por los cuales  expresar gratitud. Es la ley de asociación de ideas, y una manifestación activa de la ley de atracción: Se vuelve a crear lo que se recuerda, y por lo que se expresa gratitud.

Ahora es un excelente momento para inscribirse en una universidad para cursar la carrera con la que siempre soñó, aunque ya tenga una. O, para seguir estudios de post grado: Especialización, Magister, o Doctorado. Sea cual fuere su edad actual, es la mejor edad para hacerlo.

Forjase el propósito de independizarse económicamente. Instale un nuevo negocio, o  sucursal de su empresa en otra ciudad. Es solo un ejemplo, o una idea.

Esa energía creadora interna que busca expresarse, en cada quien, es preciso canalizarla mediante la programación de objetivos exteriores, por escrito. Caso contrario, ella buscará de expresarse de cualquier manera, y la forma principal en que suele hacerlo, es la de la insatisfacción, o frustración.

Es un mecanismo extraordinario elaborado por Dios para permitir el progreso de los seres humanos y evitar el estancamiento existencial.

El ser humano posee el poder potencialmente infinito para resolver cualquier situación que se le presente y para realizar cualquier propósito, u objetivo, siempre que lo aborde uno a la vez, por su estricto orden prioritario.

3)     RECTAS PALABRAS: En todo momento hay que expresar palabras de sabiduría. Las palabras de mayor poder son: Gracias; te amo; perdóneme; en qué puede servirle; cómo puedo ayudarte; que bien lo has hecho; te felicito; gracias por tu ayuda; gracias por tu amistad; gracias a Dios porque esto ya está resuelto; gracias a Dios, porque esto ya está realizado.

4)              RECTAS ACCIONES: El sentido de la justicia, la equidad, el amor, el cumplimiento del propio deber, la sinceridad, la excelencia en el propio trabajo, la bondad y la generosidad, entre otros valores que aportan la perfecta visión de las cosas, deben guiar las propias acciones en la realización de los propios objetivos.

5)              RECTOS MEDIOS DE SUSTENTAMIENTO DE VIDA: Hay que vivir con medios honrados de vida, no solamente sin quitarle nada a nadie, sino dando a cada quien lo suyo, bien sea el dinero que le pertenezca, el triunfo que le corresponda en una contienda de cualquier índole, deportiva o comercial. Es preciso ir por la vida con la frente alta, y que nadie pueda decir que el bocado que, cada día, una persona se lleva a la boca, no lo haya ganado con su trabajo honrado. Es mejor vivir una vida sencilla por propio mérito a una vida suntuosa inmerecida. Como decía William Blake: -“Nadie vuela demasiado alto si lo hace con sus propias alas”-. Es mejor ser que aparentar. Frente a la impostura de las apariencias, es mejor ser auténtico, ser lo que cada uno es, sin avergonzarse por ello, al contrario, hay que estar orgulloso, u orgullosa, por ser quien se es: Una expresión de la Divinidad.

6)               RECTO ESFUERZO: A qué sirve desplegar un esfuerzo descomunal para tener diez viviendas, cuando se necesita una buena para vivir, o a lo suma, dos, incluyendo la vacacional, o segunda vivienda para el descanso de los fines de semana, en la playa o en la montaña.

7)               RECTA ATENCIÓN: En lo que se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. No se puede prestar atención a dos cosas al mismo tiempo. No se pueden recorrer dos caminos, simultáneamente. No se puede estar en dos sitios al mismo tiempo. Es preciso centrar la atención en lo que se hace, para hacerlo bien.

8)               RECTA CONCENTRACIÓN: Recuerde el poder la lupa, -o lente de aumento-: Al canalizar los rayos del sol en un punto, en él se concentran los rayos del sol, produciendo la combustión. El secreto supremo es la concentración de esfuerzo, de energía, de recursos, en la realización de un objetivo prioritario a la vez. Se posee el poder potencialmente infinito para resolver una cosa a la vez, para realizar un objetivo prioritario a la vez.

Estos ocho pasos del Noble Sendero Óctuple, constituyen una magnífica percepción de Sidharta Gautama para transmutar la insatisfacción en sentimiento de auto-realización.

Es preciso recordar que la sabiduría de Sócrates residió en percibir su propia ignorancia, -la docta ignorancia-, cuando expresó: -”Yo sólo sé que no sé aquello que no sé”. Aunque, evidentemente exageró algo, ya que no parecería probable que él supiera todo lo que ignoraba. Para conocer todo lo que se ignora habría que ser Dios, ya que el aprendizaje es para toda la eternidad, sin que jamás se encuentre un límite.

Empero, cuando la pitonisa del Oráculo de Delfos lo eligió como el hombre más sabio de Grecia, él se sorprendió, y mencionó a unos cuantos contemporáneos suyos que, en su opinión, eran más sabios que él. Al visitarlos, en compañía de sus discípulos, y hacerle las preguntas de rigor en que él consideraba que le superaban en conocimientos, comprobó que la mayoría creían saber más de lo que realmente sabían. Algo similar ocurre hoy, con la mayoría de las personas que, al dominar un determinado arte, creen ser competentes para opinar, con autoridad, sobre cualquier tema que se le anteponga.

Entonces, la conclusión a la cual llegó Sócrates, era que la pitonisa, la única razón por la cual debió haberlo elegido como el hombre más sabio de Grecia, era no porque él supiese más que los otros, sino por la pequeñísima nimiedad de que, aun cuando él igualmente no sabía,  tal como le ocurría a los otros, sin embargo se daba cuenta, y estaba consciente de que no sabía.

Al afrontar la vida, en el día a día, la timidez es un rasgo detrás del cual se descubren grandes caracteres, o personalidades. El tímido es introvertido; el introvertido es un pensador más profundo; el pensador más profundo ve las cosas con mayor claridad o profundad, y llega un momento en que su timidez se transforma en seguridad, convicción y entusiasmo. Entonces, en el momento en que descubre su poder, ya nada ni nadie podrá inhibir su tremendo poder creador y su capacidad realizadora.

Aristóteles Onassis, sugería practicar algunas artes marciales, afirmando que en poco tiempo se controlarían esas sensaciones de timidez, y se adquiriría mayor seguridad en la expresión de las propias actitudes frente a la vida.

Diez respiraciones profundas contando hasta veinticinco, mentalmente, ayuda para adquirir seguridad y confianza en sí.

El ejercicio de mirarse en el espejo, en el entrecejo, cada noche, antes de dormir, o en la mañana, al levantarse, repitiéndose 30 veces, o más: -“CADA DÍA, EN TODAS FORMAS, ESTOY MEJOR Y MEJOR”, es la forma más rápida de tomar el control de la propia mente y pensamientos.

Un tercer método excelente para adquirir un total control de la propia mente, y pensamientos, es el de concentrarse, durante un breve lapso, aumentando el tiempo en forma gradual hasta un máximo de quince minutos, sobre la luz de una vela, repitiendo el mismo lema: -“CADA DÍA, EN TODAS FORMAS, ESTOY MEJOR Y MEJOR”, y cualquier otra fórmula auto-sugestiva sobre cuya cualidad, aptitud o destreza se quiera alcanzar un óptimo desarrollo.

Casi todas las personas exitosas han sido, inicialmente,  sus mayores críticos, en cuanto a sus dones, aptitudes, coeficiente intelectual, etcétera, etcétera, muchas veces dejando de apreciar sus propios dones. Es preciso desarrollar un sólido auto-concepto, una poderosa auto-imagen, y una elevada auto-estima. Para ello es preciso auto-respetarse, y por ende, respetar a cada ser con quien se entra en contacto, diariamente, en los cuatro reinos naturales.

Dentro de cada ser late la misma DIVINIDAD, sin dejar de ser la DIVINIDAD, y sin haberse separado de la DIVINIDAD.

Cada ser posee un Espíritu eterno e inmortal, dotado de la misma conciencia de la DIVINIDAD, réplica exacta de la DIVINIDAD, en la cual se expresa la DIVINIDAD, con el lenguaje de los sentimientos de los valores universales (atributos divinos), QUE ES LA SABIDURÍA INNATA, en cada ser de los cuatro reinos naturales: humano, animal, vegetal y mineral.

También, ese espíritu eterno e inmortal está dotado del poder creador potencialmente infinito de la DIVINIDAD que se expresa, gradualmente, a medida que la persona vaya afrontando necesidades en cada día de su existencia, en el eterno presente.

Mientras más grandes sean las necesidades, en mayor grado, y en forma equivalente, expresará ese mismo poder potencialmente infinito que posee.

Quiere decir, que siempre se poseerá el poder suficiente para resolver cualquier situación que se afronte, siempre y cuando se haga, con decisión firme, con determinación de triunfar.

Si se afronta una situación es porque se está en condiciones de superarla, caso contrario, la situación habría dejado de presentarse.

Hay que ver más allá de las apariencias. Dios esconde las grandes oportunidades –grandes tesoros- dentro de las situaciones que va presentando en la vida diaria. CONSTITUYEN LA NUEZ DENTRO DE LA CÁSCARA. Hay que ver más allá delas apariencias, y preguntarse: -Qué cosa buena Dios nos quiere aportar con esta situación? –De qué nos está protegiendo? –Qué aprendizaje debemos recabar? –Qué oportunidad de crecimiento contiene? –Cómo se puede resolver esto? –Cómo se puede alcanzar esta meta? –Qué se puede hacer, o, qué se debe hacer?

Los maestros sufíes, tienen un lema que lo expresan así: -“Lo que Allhah quiera; nada se le asemeja”. –Qué es lo que Allah quiere? –Allah quiere, por la Ley Cósmica, valores universales o atributos divinos, lo mejor, lo justo y perfecto, lo hermoso, lo digno, lo honesto, y sobre todo que se le deje hacer su trabajo como Él sabe hacerlo, sin pretender darle instrucciones a Dios de como Él debe hacer las cosas. Si subordinamos nuestros pensamientos, sentimientos, deseos, palabras y actos a la sabiduría de los valores universales, o atributos divinos impresos en la propia conciencia, réplica de la conciencia de la Divinidad, las cosas se expresan de una manera justa y perfecta, en armonía con todos, en el tiempo perfecto de Dios, siempre. Es preciso ser un instrumento de la voluntad divina y vivir en perfecta armonía con ella.

De qué mal mayor no estará apartando Dios a una persona, por la Ley Cósmica, con un mal menor, y qué bien no le traerá éste?

Como dice el dicho: -“No hay mal que por bien no venga”.

Los sufíes practican el Dzikr, es decir: El constante recuerdo del nombre de Dios.

Repiten el nombre de Dios por lo menos mil veces al día. Es una fuente de poder. Donde se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. Esta técnica permite la conexión con la Divinidad, y elevarse a un grado vibratorio muy elevado, de perfecta armonización. Al vibrar a una frecuencia más elevada, las de la vida diaria, de rango más rudimentario dejan de afectar, ya que los opuestos jamás se juntan. Al vibrar en una frecuencia más elevada, por efecto de la resonancia magnética, se transmuta el entorno depurando el ambiente, atrayendo lo análogo, y repeliendo lo desemejante. Al encender la luz de la conciencia, se evacua la oscuridad por si sola.

Todos los grandes hombres –y mujeres-, de la humanidad, han alcanzado sus mayores éxitos después de importantes fracasos. Nadie puede declararse vencido mientras su voluntad, firme, le empuja a seguir adelante. Después de la tempestad viene la calma, y el buen tiempo.

Además, es la ley de la vida, SEGUIR ADELANTE.

En el momento en que una persona se niega en abandonar, es el instante en que se activan los poderes creadores de la mente y comienzan a surgir cosas maravillosas: coincidencias que aportan los resultados apetecidos.

Eso ocurre en el momento más crítico de la vida, o de las situaciones. Es como decir: En la noche más oscura, brillan más intensamente las estrellas; después de la tempestad, sale el arco iris. A medianoche en punto, un segundo después, empieza el nuevo día.

La improvisación se resuelve con estudio, leyendo libros especializados, asistiendo a cursos, seminarios, etc. Un vendedor exitoso lee un libro semanal de ventas, de psicología, o motivación, etc. Un abogado, estudia dos o tres horas al día para ser un mejor abogado; y así sucesivamente.

Tomás Alva Edisón, patentó más de mil inventos, y gracias a él tenemos la bombilla eléctrica, entre otros creaciones. Fue calificado por su maestra, quien lo expulsó de la escuela, según ella, por inepto para los estudios. Pero, su madre, que veía con mayor claridad, le respondió que ella se encargaría de su educación. Edisón no fue a la escuela, pero demostró ser un genio. Tenía 60.000 libros en su biblioteca, en todos los temas de su interés. Era un asiduo estudioso con una curiosidad insaciable.

Recordemos que Edisón probó más de 10.000 filamentos para perfeccionar la bombilla eléctrica. Qué hubiese ocurrido si en la prueba 5.000 hubiese abandonado, considerándose un hombre fracasado?

Henry Ford, el hombre más rico de su tiempo, fue acusado, en cierta ocasión, por un periodista, de ignorante. Pero él se defendió diciendo, después de escuchar divertido las razones que aquel esgrimía en su contra: -“En mi escritorio tengo una serie de botones, que, cuando necesito conocer algo, aprieto uno de ellos, y al instante aparece un ingeniero de mi staff que me responde cualquier pregunta, sobre el tema técnico que preciso conocer en ese momento. El juez de la causa, entendió, por esa razón, de que Ford no era un ignorante. Sabía lo que quería y como conseguirlo, y contrataba a todas las personas que pudiesen serle útiles para sus propósitos comerciales.

Y además, Ford se reunía con otros genios como él: Harvey Firestone, Luther Burbank, Andrew Carnegie, Tomás Alva Edisón, Napoleón Hill, entre otros. Ford era el que mejores sueldos pagaba, a sus trabajadores, para lograr disponer del personal más cualificado, con lo cual disponía de la lealtad de los mismos, ya que cuidaban un trabajo que sólo él le ofrecía en ese nivel.

La gente con ímpeto creador jamás considera que haya fracasado porque se demore la realización de un proyecto. Si las cosas no funcionan de una manera, prueban de otra, hasta conseguir que funcionen, aunque pasen una eternidad para obtenerlo. Siempre tienen una curva de resultados claramente definida, con el tiempo previsto dentro del cual, en forma razonable es factible alcanzar los resultados anhelados. Jamás abandonan a mitad de camino, ya que, cuando las cosas se ponen menos fáciles, saben que es el momento en que están más cerca de alcanzar su propósito. Persisten, incansablemente, tenazmente. Bolívar era más Bolívar cuando las cosas se ponían en su situación menos fácil. Conservaba la serenidad y la idea clara de los resultados que buscaba alcanzar. Lo demostró en Casacoima y en Pativilca, entre otras circunstancias. En la primera, saliendo de una situación emergente, y en forma providencial, soñando con la Campaña del Sur, para emancipar a Latinoamérica, cosa que, efectivamente, luego realizaría con éxito. En la segunda, en condiciones adversas, respondiendo al General Mosquera, a una pregunta sobre lo que pensaba hacer: -“Triunfar”, le dijo, con vivo tono de voz, y seguridad en lo que decía, pasando, acto seguido, a explicarle la forma en que pretendía hacerlo, lo cual, posteriormente, llevó a cabo con absoluta precisión.

Michele Isgró Scibilia, un siciliano que inspiraba a toda persona que le trataba, con la excelencia de los valores que les eran inherentes, de honradez, fortaleza, sinceridad, tenacidad, confianza en sí mismo, tenía un lema de profunda sabiduría y poderoso estímulo: -“Cuando el mundo parece que se acaba, comienza de nuevo”-.

Evidentemente, cada mañana empieza un nuevo día y con mente fresca las cosas se ven con mejor talante y mayor dominio creador.

Recordemos, una vez más, para concluir, la fábula del rosal, de Niko Kazantzakis, por su hermosa moraleja: -“Un día, las ortigas pidieron al rosal: -Señor rosal, ¿no quieres enseñarnos a nosotras también tu secreto? ¿Cómo te ingenias para hacer las rosas? Y el rosal respondió: -Hermanas ortigas, mi secreto es muy simple. Durante todo el invierno, con paciencia, confianza y amor yo trabajo la tierra y solo tengo una cosa en mi mente, la rosa. Las lluvias me azotan, los vientos me deshojan, las nieves me cubren, pero yo solo una cosa tengo en mi mente, la rosa. Éste es mi secreto, hermanas ortigas”.

Adelante.

INSATISFACCIÓN CREADORA O DESCONTENTO DIVINO

Bolívar y su inspiración en el Chimborazo

INSATISFACCIÓN CREADORA
O DESCONTENTO DIVINO

©Giuseppe Isgró C.


El ser humano, al igual que todos los seres en los demás reinos naturales, son productores constantes de energía creadora que busca expresarse en dos vertientes: en primer lugar, para satisfacer las necesidades en todas sus variantes: básicas, de seguridad, afectivas, de estimación, de autorrealización y de conexión espiritual con la fuente universal. La segunda vertiente, es para la realización de los objetivos, personales o profesionales, en todos los ámbitos existenciales.
Mientras la persona no tenga una necesidad imperiosa que satisfacer, problema que resolver, u objetivo que alcanzar, a corto, mediano y largo plazo, la producción de energía creadora, al no encontrar salida hacia el exterior, por cuanto la persona no tiene objetivos establecidos como metas, ni necesidades imperiosas ni problemas que resolver, por las múltiples razones que fueren, por ausencia de motivación, por no saber lo que quiere, etcétera, entonces, la persona, en vez de afrontar la realidad, y superarla, la evade. Entonces, la energía busca un escape hacia dentro, y se expresa como insatisfacción.
 La psicología humanística de Abraham Maslow, y su escuela, la denomina INSATISFACCIÓN CREADORA, por cuanto, al igual que el agua en una represa, bloqueada por un dique, se va acumulando, hasta que llega el momento en que la fuerza del agua se haga incontenible y rompa el dique.
La energía creadora, llega el instante en que induce a la persona a la acción. Esto, realmente, en la práctica tiene fácil aplicación: por una parte, al agravarse la situación por resolverse, la persona es impelida a la acción: Cuando tiene hambre, tiene que comer; para adquirir los recursos, debe trabajar. Si tiene frío, tiene que cobijarse.
Las necesidades sociales, de ser aceptado en un grupo, le hacen formar familia, a buscar trabajo, a ingresar en un centro de formación profesional, en un club, etc.
 Las necesidades de estimación, propia o ajena, le llevan a realizar obras ejemplares para granjearse su propia estima y la de los demás.
Se puede transformar la insatisfacción creadora por medio de: primeramente: anteponiéndose objetivos por escrito.
Desde el instante en que la persona se antepone los objetivos por escrito, la energía creadora se canaliza hacia el logro de los mismos, produciendo una sensación de bienestar y un sentimiento de autorrealización. En segundo lugar, es preciso tener presente que: desde el momento en que se afronta una situación por resolver, es porque se está en condiciones de resolverla, caso contrario jamás se habría topado con ella.
Al tomar la decisión de afrontar cualquier situación que requiera solución, automáticamente, comienzan a aflorar las ideas y la energía creadora suficientes tendientes a su total y satisfactoria solución.
Esta genial percepción de Abraham Maslow, la tuvo, también, cinco siglos antes de nuestra era, Sidharta Gautama, cuando en el Parque de los Ciervos, da su primer discurso, hablando de las Cuatro Nobles Verdades.
Allí, él explica la insatisfacción que el ser humano experimenta, la cual denomina con el término pali, “dukka”, que significa insatisfacción, y que algunos traductores denominan “sufrimiento”. Atribuye la causa de la insatisfacción a los deseos en polaridad negativa.
Aporta una palabra de aliento, al afirmar que es posible erradicar la causa de la insatisfacción, y muestra, de manera contundente, que la manera adecuada de transmutar la insatisfacción –o sufrimiento-, es la aplicación del Noble Sendero Óctuple, es decir: Rectas opiniones, rectos propósitos, rectas palabras, rectas acciones, rectos medios de sustentamiento de vida, recto esfuerzo, reta atención y recta concentración. Es una percepción realmente genial y su aplicación transforma la vida de cualquier persona, desde un estado de insatisfacción, que es, virtualmente constante, hasta el de su transmutación, en estado de autorrealización o felicidad.

jueves, 6 de junio de 2013

EL SECRETO DE DAR


EL SECRETO DE DAR


©Giuseppe Isgró C.



Desde los tiempos antiguos, la humanidad  ha sido condicionada con el principio de dar, como fuente de riqueza.


Quienes comprenden este principio de dar y lo aplican, comprueban que es efectivo. Muchos se enriquecen, otros viven más felices o, simplemente más prósperos.

El secreto de dar es que  proporciona motivo de vida e imprime sentido direccional a  la misma.

Algunos lo aplican dando el diezmo; es decir, la décima parte de lo que ganan. Otros, dan servicio, dedicación, amor, conocimiento, estímulos, productos, etc.

La oferta aplicada constituye el secreto de dar, sobre todo orientada hacia la demanda pasiva o potencial, cuyas necesidades crean toda la oferta que se requiere como fuente de intercambio, bienestar y riqueza.

¿Cuales son las necesidades que es preciso satisfacer? ¿Dinero, amor, compañía, prestigio, auto-realización, etc.? Abre la puerta de tu vida para dar a otros lo mismo que tu requieres: Dinero, a través del servicio  y asesoramiento efectivo; amor genuino y abundante, compañía  amistosa o afectiva, interesándose por los demás en una acción social útil, etc., prestigio, por medio del reconocimiento sincero de la labor cumplida por otros, dando el elogio justo en cada caso. 

La auto-realización  se alcanza orientando el propio desarrollo en dirección de convertirse en la persona que se anhela ser, construyendo en lo interno, para alcanzar  mayor capacidad de construir en lo externo, haciendo la mayor suma  de bién posible a la humanidad, por cuanto, tu aporte es útil a la sociedad  y sobre tus hombros reposa parte del peso del mundo.

Da lo mejor de tí mismo a partir de hoy, sin preocuparte de la compensación. Todo acto tiene en sí mismo su compensación, dijo el gran sabio Ralph Waldo Emersón.

Da el mejor servicio a la empresa donde prestas tus servicios, aunque pienses que te pagan menos de lo que  mereces. Si estás en un cargo público, la mejor forma de progresar es prestando  un servicio excelente, con probidad, por cuanto ésta no pasa desapercibida y cada vez te confiarán cargos de mayor jerarquía y responsabilidad; y,  siempre, tus servicios serán  apreciados.

Si eres médico, abogado, ingeniero, empresario, magnate, comerciante, ejecutivo, educador, estudiante, ama de casa,  oficinista,  vendedor profesional, etc.,  a nadie escapará  que estás ofreciendo un servicio con excelencia, con lo cual generarás medios recíprocos  portadores de más riqueza y plenitud de vida.

Toda oferta crea su demanda. Dando lo que otros necesitan se recibe lo que se anhela. 

Adelante.




ALIENTO CÓSMICO


ALIENTO CÓSMICO

©Giuseppe Isgró C.



Al realizar objetivos claramente definidos y programados, en el espacio y tiempo, o, enfrentar situaciones para resolverlas, se dispone, internamente, de un aliento cósmico que empuja a seguir adelante, hasta alcanzar la meta prefijada.

 Es la fuerza creativa interior que busca expresarse, en todo momento, de la mejor forma posible. Una pelota, sumergida en el agua, siempre emerge a la superficie.

Una semilla introducida en la tierra, germina y la nueva planta crece saliendo al exterior. Tanto la pelota como la semilla, están dotadas de una fuerza, aliento, que han absorbido del medio ambiente, la cual le imprime el dinamismo necesario para mantenerse a flote o, crecer adecuadamente según el fin natural de cada especie.

La ley cósmica, expresa...  “Todo ser absorbe el aliento cósmico, energía o vibraciones electro-cósmicas, en grado proporcional a las aspiraciones existenciales, en un momento dado”.

Para optimizar el poder creativo se requiere centrarlo al igual que los rayos del sol a través de una lupa, en un minúsculo punto u objetivo, a la vez, para encender la llama de la realización.

 La fuerza del aliento cósmico potencia al ser para alcanzar el éxito en cualquier propósito.

 En la medida en que, los objetivos son más elevados, la sintonía mental con dichos resultados, lleva a la persona a respirar de una manera diferente que lo carga de la vitalidad  requerida; paralelamente, existe una especie de respiración anímico espiritual, la cual aporta la energía psico-mental en grado suficiente y equivalente a la magnitud de la tarea por realizar.

 La propia dinamo psico-mental, al requerir mayor carga de energía cósmica, se conecta, automáticamente, con la dinamo cósmica, cargándose con la potencia requerida.

 Por eso los antiguos decían... “Hazlo y tendrás el poder”; el poder para hacerlo.

 Mientras más elevadas las metas, se aspira mayor cantidad de aliento cósmico, casi en forma imperceptible, pero real y efectivamente.

 Cuando existen diferentes objetivos  por realizar, para aprovechar al máximo la potencia del aliento cósmico que dinamiza la voluntad realizadora, se requiere planificar, los resultados apetecidos, en base a un estricto orden prioritario, por escrito, realizándolos uno a la vez.

 Desde el acto de planificar, a la realización de los resultados que deben ser alcanzados, existe un trecho en cuyo recorrido el aliento cósmico, acompañado de esa fé que mueve montañas, es el fuego constante que permite persistir, tenazmente, en pos de las metas hasta alcanzarlas una y otra vez, siempre a niveles más elevados. Mientras más lejanos parezcan los resultados, más intensamente debe ser concentrado el aliento cósmico en un pequeño punto de realización a la vez.

 Con cada logro se gana en confianza, acrecentándose el poder de la fe, en la vida, en los principios cósmicos, sus leyes y valores universales, en sí mismo y en los demás aplicando siempre las regla de oro de “hacer a los demás lo mismo que se gustaría recibir”. Mientras persista un ciclo existencial, el aliento cósmico manifestará siempre su potencia empujando al cumplimiento de la verdadera misión en la vida. A medida que los objetivos alcanzan niveles más elevados y se asume mayor grado de compromiso social, se crea, en cada uno, la necesidad de absorber el aliento cósmico, en la magnitud precisada.

Casi imperceptiblemente, cada ser va adoptando la actitud mental correcta y creando modificaciones psicosomáticas, en sí mismo, e indirectamente, influye en la modelación del medio en que se desenvuelve, donde, desde el ritmo respiratorio que permite acumular, manteniendo mayor potencia vital, hasta el aliento cósmico, que por la sintonía psico-mental establece a nivel psiconsciente con las mentes capaces de cooperar, se van abriendo canales mentales a través de los cuales las fuerzas cósmicas se manifiestan para realizar los propósitos universales.

 El místico ve, el sabio comprende, la persona de éxito ve, comprende y realiza, actuando en consecuencia, logrando los resultados que le permiten el grado de compromiso social asumido en las tareas cósmicas, acorde con las propias fuerzas, capacidades y visión existencial.

 El aliento cósmico suficiente está presente para secundar la obra iniciada.

 Mientras más altas las aspiraciones personales de cada uno, debe esforzase en mayor grado y en ese esfuerzo va absorbiendo el aliento cósmico requerido.

 Si las aspiraciones son elevadas la carga de aliento cósmico es equivalente. Si la fuerza acumulada es excesiva, la naturaleza desarrolla paralelamente grandes virtudes para equilibrar los resultados.

Adelante.



SEMILLAS DEL ÉXITO: -“Los pensamientos son semillas que germinan en el jardín de la vida, donde se cosecha tanto más de lo que se siembra”.- Giuseppe Isgró C.


SEMILLAS DEL ÉXITO

©Giuseppe Isgró C.


-“Los pensamientos son semillas
que germinan en el jardín de la vida,
donde se cosecha tanto más de lo que se siembra”.-
Giuseppe Isgró C.



Por los frutos se identifica el árbol, así como por los resultados se evalúa la acción desplegada en todas las realizaciones humanas.

Según el tipo de cosecha deseada, se cultivan los árboles. En base a éstos, se seleccionan las semillas, el terreno  y la época del año, más convenientes. Luego, se aporta el TRABAJO DECIDIDO, el abono de la tierra, su riego y cuido. Al final, GERMINA LA SEMILLA, emergiendo del seno de la tierra, transformándose en planta, arbusto o árbol, produciendo los frutos apetecidos. El agricultor experto corrige y crea las condiciones mejores y, obtiene, CON SU ESFUERZO, PACIENCIA y CONSTANCIA, los resultados anhelados.

Si deseas riqueza integral, salud, armonía, abundancia, sabiduría,  felicidad y poder, debes sembrar los pensamientos adecuados a través de la autosugestión y visualización creativa, por cuanto, ellos son semillas que germinan y, al desarrollarse, darán sus frutos respectivos.

Para erradicar,  del terreno de tu mente, árboles que  te insatisfacen, solo te bastará sembrar las nuevas semillas de los frutos que anhelas cosechar.

Siembra pensamientos positivos y, mantén, en la mente, las ideas claras de los resultados esperados, con la confianza y fe de que serán logrados. Agrega ENTUSIASMO, DEDICACION, TENACIDAD Y DETERMINACION DE TRIUNFAR CADA VEZ MAS Y MEJOR.

Cultiva, desarrollando, las acciones y estrategias que, al crecer los NUEVOS FRUTOS del hombre más exitoso en que te transformas, gradualmente, crean, en ti, el panorama fresco de una existencia  sosegada, de paz, felicidad, armonía, luz, equilibrio y orden, bienestar y poder, sabiduría y riqueza, éxito y autorrealización, vida abundante, vigor, madurez, gozo, quietud mental y amor.

En la naturaleza, cada semilla da su fruto, y viceversa.

Cada logro que alcanzas, contiene, en sí mismo, las semillas de las nuevas realizaciones.

Si eliges adecuadamente, los frutos de tu vida serán los que apeteces.

Define, asumiéndolos, los objetivos que debes alcanzar. El mecanismo de la propia computadora mental realizará el resto, sí con confianza, persistes en la acción.

Ralph Waldo Emersón, dijo: -“Toma lo que quieras y paga el precio”. Puede ser de cualquier índole: dinero, dedicación, tiempo, esfuerzo, prestigio, etc. Deja de aspirar a la obtención de logros sin pagar el respectivo precio.

Las reglas sugeridas, son:

1.      En cada situación, cerciórate de cual es el precio, para ver si  puedes o estás dispuesto de pagarlo.

2.      Deja de tomar algo cuando rehúsas pagar su precio; por cuanto, sí lo tomas e impagas, adquieres una deuda que causa intranquilidad en la conciencia, e implica, siempre, un pago. Recuerda, todo tiene su precio y hay que pagarlo.

3.      Cuando comprometes tus esfuerzos en un proyecto, propio o ajeno, averigua, antes, sí los demás están en disposición y desean pagar lo que valen tus servicios, en caso contrario, deja de realizar el trato. Desempeña tus funciones, profesionales o técnicas, únicamente con aquellos que están dispuestos de pagar el precio. Es fundamental tener claro, en la mente, el resultado final que se obtendrá cuando se haya realizado la acción.

4.      Tú, formas parte de un  plan universal, por lo cual, al lograr formas más efectivas para alcanzar resultados con el menor costo posible en cuanto a esfuerzos, energía, tiempo y recursos, te constituyes en un mejor canal de expresión  de la Inteligencia Divina para alcanzar logros que, además de aportar beneficios en lo personal, contribuyan a la realización de objetivos universales, en bien de la humanidad.

5.      ¡Tú puedes, sí quiere! Todo va bien. Adelante.


Afirma:

Tengo valor. Dentro de mí vibra la seguridad. Tengo confianza en mí mismo y en mis propias  aptitudes. Cada día, aumenta más y mejor mi capacidad de trabajo, de estudio y energía creativa.  Mantengo en mí vida un perfecto equilibrio físico, mental y espiritual, salud y fortaleza.

Mi serenidad, calma y tranquilidad aumentan cada día más. Tengo las ideas claras de los resultados, objetivos y metas que debo alcanzar a corto, mediano y largo plazo.

Administro, con efectividad, mi tiempo, actividades y finanzas.

Cada día, establezco, claramente, las prioridades a las cuales debo concentrar todo mi esfuerzo y energía creativa. Las ideas que necesito surgen claramente en mi mente y estoy, en todo momento, en el lugar adecuado, desempeñando las funciones correctas y en contacto con las personas que pueden coadyuvar a las realizaciones de mis objetivos.

Me pongo bajo la inspiración divina para que pueda ser cada día mas útil en el desarrollo de los planes del Gran Arquitecto del Universo, al bienestar colectivo y a una vida mas digna, rica y frutifera para mí familia y para mí.
Hoy, antes de las: _______Am/Pm, habré realizado lo siguiente:  ___________________________      
    (Detallar).    Así es, así será. Hecho está.


Repite esta afirmación todas las veces que lo desees, preferiblemente en las mañanas. Visualiza las imágenes correspondientes en la pantalla mental. Exito. Adelante.



EL ENCUENTRO EN LA VICTORIA



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UN ENCUENTRO EN LA VICTORIA

Autor: ©Giuseppe Isgró C.

Del libro: La Victoria

Capítulo I

Me encontraba un día, en una fuente de aguas tranquilas, cristalinas, cuando se me acercó un Venerable hombre, vestido a la antigua usanza, con bata blanca, larga, pelo y barba que alguna vez fueron de color pelirrojo y un báculo en la mano derecha.

Concentró sus ojos en los míos; su mirada era profunda, serena y apacible.

Con voz suave y afectiva, me dijo:

-“Hola, hijo, como estás”-.

–Bien, -le contesté-; y, ¿usted?

–Por aquí andamos; -fue su respuesta-, mientras me sonreía.

-¿Dónde estamos?, -le pregunté al Venerable hombre-.

-Este sitio es conocido como La Victoria; -me contestó-. –¿Qué haces por estos lados?

-Salí esta mañana, temprano, con el coche, a dar un paseo; luego, al llegar a esta zona, me paré a contemplar la belleza de los araguaneyes y decidí caminar un poco y la verdad que, absorto en mis reflexiones, caminé por lo menos durante dos horas, hasta llegar aquí. Desconocía este hermoso lugar. Y, usted, -¿vive por aquí cerca? -le pregunté-.

Un poco más arriba, en esa colina boscosa. Hace algunos años, -relata el Venerable hombre- decidí retirarme de la agitada vida ejecutiva en que me desenvolvía profesionalmente, como abogado, en la ciudad de Quebec, Canadá, aunque he viajado por diversos países asesorando a incontables líderes. Construí la casa, en esta zona tropical, con la idea de pasar aquí los meses de invierno. Me dedico al estudio de la vida, a la meditación y a cultivar mi jardín y de vez en cuando, a escribir mis reflexiones, las cuales, algún día, habrán de ser publicadas para esparcir un poco la luz que he podido vislumbrar en mis estudios metafísicos-espirituales.

-¿Quieres tomar un café? –Me preguntó el Venerable hombre-. Lo he traído de Caripe El Guácharo; es de los más exquisitos que he probado.

-Sí, con gusto se lo acepto; -le contesté-.

Nos fuimos caminando por un sendero rodeado de árboles cargados de mangos, aguacates, naranjas y una hilera de cayenas de diversos colores. A lo lejos, el ruido de la brisa se oía apaciblemente. Todo era quietud, armonía y paz. Pero, sobre todo, lo que más me impresionaba era la apacibilidad y el sosiego del Venerable hombre de La Victoria. Emanaba de él un flujo de fuerza que, en su presencia, me sentía con un poder y una seguridad nunca antes experimentados. Fuerzas bienhechoras se iban apoderando de mí y aquella paz y relax que buscaba en la mañana, al salir a dar un paseo, sin percatarme de ello, las estaba experimentando ya.

Después de unos quince minutos de caminar, llegamos a la casa del Venerable hombre. Su aspecto exterior humilde estaba lejos de dejar entrever lo que segundos después habría de asombrarme con lo que encontré en el interior.

Al entrar, en la casa, una joven de unos veinte años saludó al Venerable hombre.

-¡Hola, abuelo!, ¿cómo estás?

–Bien, hija, -contestó el Venerable hombre-. -Prepara un poco de café, Lucía, mientras conversamos un poco, adentro.

-Por cierto, te presento a Santiago, quien ha llegado paseando hasta La Victoria.

Después de la presentación, entramos en la biblioteca del Venerable hombre. Un salón grande, lleno de estantes de libros por todas partes, lo cual hacía inimaginable dicho cuadro desde el exterior. Algunos cuadros al óleo de morichales y de personajes históricos, presentaban un ambiente acogedor. En un rincón se encontraban diversos retratos de Tagore, Gandhi, Cicerón, Séneca, Ibn Arabi y un dibujo de Don Quijote y Sancho Panza. En un pequeño cuadro, podía leerse: -“Lo que Alá quiera. Nada se le asemeja”-.

-Le felicito por este inmenso tesoro que usted tiene aquí, -le dije al Venerable hombre-. -¿Cuáles son los temas de su interés?

A lo cual, me contestó: -Como usted puede ver, Santiago, -y me invitó a recorrer los estantes- aquí hay libros de variados temas: clásicos de todos los países y épocas, desde los Vedas, los Upanishads, el Mahabaratha, los libros de Confucio, El Tao te King, de Lao Tse, el Poema de Gilgamesh, el Código de Amurabí, autores griegos, como Homero y Hesiodo. Se encuentran las obras completas de Euclides, Platón, Aristóteles, Teofrasto, Demetrio de Falereo, de los Presocráticos, Epicteto, Plutarco, etcétera; de los latinos, autores como Séneca, Cicerón, -que son mis preferidos-, Julio César, Tito Livio, Dionisio de Halicarnaso, Marco Aurelio, así como libros de Psicología, Gerencia, Sufismo, Yoga, ensayos, filosofía, parapsicología, hermetismo, El Quijote, libros de economía, filosofía, etcétera, en fin, un poco de todo lo que es preciso conocer para poder entender el significado de la vida: de dónde venimos, por qué estamos aquí y hacía dónde vamos, sin lo cual, la vida no tendría sentido, sobre todo por el gran afán a que está sometido el ser humano en la agitada vida moderna.

Nos sentamos en sendas butacas y nos entretuvimos conversando de temas diversos. Al poco rato, entró Lucía con dos tazas de oloroso café y unos biscochos, que degustamos con agrado en una amena e interesante conversación. Al fondo, podía oírse una suave música de Beethoven.

Pasamos cerca de una hora conversando de sobre la Atlántida, Egipto, los griegos, de Homero, de los sufíes, del budismo zen, los poderes del espíritu, meditación, etcétera, después de lo cual, le hice una pregunta directa.

-Seguramente, usted ha desarrollado alguna técnica de meditación y algún método de resolución de situaciones, en la vida, que me quisiera explicar, ya que, según observo, para tener usted una serenidad tan acentuada y una fortaleza física a la edad que imagino que usted debe tener, -cerca de noventa años- es porque ha encontrado en su larga experiencia algún secreto que quizás quisiera compartir conmigo.

Santiago, -me dijo el Venerable hombre, si vuelves a visitarme otro día, quizá te cuente algo que te pueda servir. Empero, antes de que te vayas, te haré entrega de unos apuntes que hace ya muchos años, en una época en que yo andaba a la búsqueda de sosiego y tratando de encontrarle sentido a la vida, un Venerable hombre que, en una edad similar a la mía, a su vez me entregara y cuya práctica asidua me permitió domar la mente, encarrilar mi vida y poner bajo control los hilos del destino. Son veintidós manuscritos, y una meditación diaria, –continuó diciendo el Venerable hombre, que si bien son ya un poco antiguos, podrás copiarlos de nuevo y si pones en práctica las técnicas que contienen, darás a tu vida un esplendor que habrá de sorprenderte agradablemente.

-Una vez que los hayas probado con total y absoluta satisfacción de tu parte, -me dijo, ponlos en limpio, en forma de libro y publícalo para que su mensaje llegue a mayor número de personas. Hacía tiempo que esperaba a alguien a quien confiarle este legado y creo que hoy, al llegar aquí, en la forma en que lo has hecho, tus pasos han sido dirigidos por Aquel que todo lo sabe y puede, por la Ley Cósmica, y en cuyos planes universales, todos somos sus instrumentos.

Me despedí del Venerable hombre y de su adorable nieta, sintiendo dentro de mí fuerzas desconocidas hasta entonces que preanunciaban grandes cambios en mi vida.

En los días siguientes, aparté una hora diaria, antes de dormirme, y leí y releí, todos los manuscritos, de la siguiente manera: En primer lugar copié la Meditación diaria en un cuaderno, el cual leí durante veintidós noches y mañanas seguidas, tal como lo indicaban las instrucciones de la misma.

Una nota al pie de página mencionaba que si yo la transcribía en un cuaderno, el hecho de hacerlo, grabaría en mi ordenador mental las instrucciones y me sería más fácil desarrollar, en mi personalidad, las cualidades y condiciones que formaban parte de los objetivos implícitos en la misma.

De los veintidós manuscritos, cada lunes, a las once en punto de la noche, copiaba uno en el cuaderno, y durante el resto de la semana, a la misma hora, lo leía y meditaba, siguiendo las fáciles y efectivas técnicas e indicaciones al inicio del mismo.

Cuatro semanas después de leer durante veintidós días seguidos, en la noche y en la mañana, la meditación diaria, comenzaron a manifestarse en mi vida una serie de cambios positivos que me dejaban asombrado a mi mismo, pero, también, los miembros de mi familia y a mis amistades; sobre todo mi semblante comenzó a ser más apacible; volví a sonreír desde el interior; mi estado anímico era de contento; me sentía más seguro de mi mismo; comencé a confiar más en la gente, en la vida y a vislumbrar el sentido de mi misión en la vida –percibía cosas que antes me pasaban desapercibidas, a pesar de haber estado siempre allí. Sentía fluir en mí una nueva corriente vivificadora de prosperidad, de felicidad, de alegría de vivir. Mi entusiasmo y amor por la vida y por mi familia, por mi trabajo y por las personas, crecía día a día. En aproximadamente dos meses había logrado muchas de las cosas en las cuales había soñado desde hacía años. Había dado un paso sorprendente en el camino de la autorrealización.

Efectivamente, pude comprobar que me fue relativamente muy fácil desarrollar las aptitudes y actitudes a nivel físico, mental, emocional, espiritual y en diversos aspectos de mi vida, como el financiero, que comenzó a mejorar casi inmediatamente, así como, surgieron nuevas oportunidades que comencé a aprovechar, casi sin esfuerzo de mi parte.

Transcurría el año de 1967 y mi vida había encontrado un sendero que habría de conducirme a cooperar en forma más efectiva en el plan divino que el Supremo Hacedor, en algún momento, había diseñado para mí.

Tres meses después volví a aquel lugar donde había encontrado al Venerable hombre de La Victoria y allí estaba la fuente que él dijo llamarse La Victoria; empero, cuando traté de encontrar el camino para llegar a la casa donde amablemente me ofreció un delicioso café, preparado por su nieta Lucía, no logré encontrarlo, pese a haber recorrido durante un par de horas por los alrededores. Pregunté a varias personas para ver si podían indicarme como llegar a la casa del Venerable hombre y cual fue mi sorpresa, nadie lo conocía.

Empero, después de tanto buscar, volví a encontrar la casa donde vivía el Venerable hombre de La Victoria, pero se encontraba abandonada. Su aspecto indicaba que debía encontrarse en ese estado un lapso mayor del que mediaba con el encuentro de aquel ser extraordinario. Es sorprendente como los inmuebles solos acusan el paso del tiempo en mayor grado que los que son habitados. Si no fuera por los manuscritos pensaría que el encuentro no fue más que un simple sueño. -¿O se trata, acaso de un sueño combinado con un fenómeno de aporte? Personalmente, no lo creo. El encuentro fue muy vívido y real. El aromático café servido por Lucía estaba exquisito. Durante varios años volví al lugar varias veces, la casa seguía sola. La última vez que volví, no la pude ubicar y sin tener tiempo suficiente para seguir buscándola, me fui. Ahora, vivo muy lejos de aquella zona, en otro continente; han transcurrido muchos años y después de tanto tiempo es poco probable que vuelva allí; pero, los manuscritos y la meditación diaria obran en mi poder, me han transformado y han enriquecido mi vida.

Durante más de treinta y cinco años he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen los manuscritos y la meditación diaria y cada vez que los pongo en práctica, experimentos los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para mí.

Su contenido es eminentemente práctico; no hay teorías superfluas. Si lleva a cabo los ejercicios que contienen, es probable que, gradualmente, se vaya efectuando la transmutación alquímica de su ser sintonizándose con los elevados resultados existenciales, los cuales, por añadidura, al ser creados a nivel mental, se van manifestando en su propia vida, oportunamente.

Sobre todo, con estos ejercicios, me percaté, cuando el Venerable hombre me entregó los manuscritos, de que se dispone de un método para domar la mente y ejercer un pleno dominio sobre la vida en general y, por ende, sobre el destino y controlar, cuando eventualmente se presenten, todas las situaciones, manteniendo un perfecto equilibrio físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

El Venerable hombre de La Victoria me comentaba que todo se puede lograr en la vida si se siembra la respectiva semilla por medio de correctas decisiones acordes con la propia y elevada auto-estima y dignidad personal, desarrollando el convencimiento de que sí se puede hacer, por medio de las afirmaciones, las visualizaciones y meditaciones, la experimentación de un estado emocional acorde al momento de ser logrados los respectivos resultados y la practica del desapego, es decir, dejar encargada a la mente psiconsciente del logro, y además, se espera el tiempo necesario haciendo, mientras tanto, todo lo que se requiere, según el caso o los objetivos por alcanzar.

Estas técnicas funcionan, me decía una y otra vez el Venerable hombre de La Victoria; luego, agregaba: -las he probado por más de cincuenta años y quien, a su vez me las entregó, habría hecho otro tanto, aseverando que eran efectivas, si yo seguía fielmente las instrucciones y las ponía en práctica con expectativas positivas.

Desde que en 1967, el Venerable hombre me hiciera entrega de los manuscritos, han transcurrido un poco más de de treinta y cinco años, durante los cuales yo también he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen, y cada vez que me ejercito con ellos, experimento los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para todos los que hemos aplicado las enseñanzas del Venerable hombre de La Victoria.

Él me repetía constantemente: -“¡Tú puedes si crees que puedes hacerlo! ¡Hazlo y tendrás el poder!

Recuerdo que ese día el Venerable hombre me dijo: -ejercer el poder con que la naturaleza de las cosas ha dotado a cada ser, cultivando los dones inherentes y aprendiendo todo lo que se pueda de sí y del vasto universo del que se forma parte, es una manera efectiva de ser cada día más feliz. Luego, cuando me despedí de él, expresó: -“¡Que cada día brille más y mejor tu luz interior!”.- Adelante.

Capítulo 2

Meditación diaria

Es lunes en la noche, son las once en punto.

Me dispongo a copiar textualmente, en el cuaderno que he dispuesto para ello, el manuscrito identificado con el título:

Meditación diaria

Dice así:

Afirme, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desee, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubra cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en su vida:

MEDITACIÓN DIARIA

Afirma, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desees, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubre cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en tu vida. Al encender la luz en la mente se ilumina la propia existencia y todo en derredor vibra al unísono y con el mismo sentimiento de felicidad y bienestar, interrelacionándose por la ley de afinidad.

1. -Entro en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, contando de tres a uno: Tres, dos, uno.

Ø Ahora, estoy ya en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre.

Ø Voy a permanecer en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, durante quince minutos y voy a programar los siguientes efectos positivos, los cuales perduran, cada vez mejor, hasta que vuelva a realizar este acceso y programación mental:

Ø Todo va bien, siempre, en todos los aspectos de mi vida, cada día mejor. (Tres veces). –Imagínalo-.

Ø Todo va bien en mi trabajo; cada día logro mejores niveles de efectividad, prosperidad, riqueza, abundancia y bienestar. (Imagínalo).

2. Formo una unidad cósmica perfecta con el Creador Universal, -ELOÍ. (Diez veces, con los ojos cerrados). Hoy se expresa en mí la Perfección universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión en todos los aspectos de mi vida.

3. -Cada día, en todas formas y condiciones, mi cuerpo y mi mente funcionan mejor y mejor. La consciencia de mi conexión permanente e indisoluble con el Creador Universal, -ELOÍ-, restablece y mantiene en mí, diariamente, durante las veinticuatro horas del día, un perfecto estado de salud a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Creador Universal, por darme un cuerpo perfecto, saludable, lleno de energía. Aquí y ahora, me siento en perfecto equilibrio de salud, a nivel físico, mental, emocional y espiritual.

4. Afronto y resuelvo bien toda situación que me compete, siempre.

5. Todo tiene solución, en todas las situaciones de mi vida.

6. El Creador Universal, -ELOÍ-, es en mí, cada día mejor, en todos los aspectos de mi vida, fuente de amor, luz, sabiduría, éxito, riqueza, prosperidad, abundancia y armonía.

7. Permito que las leyes universales de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión actúen bien en el plan de mi vida.

8. Tengo prosperidad y poder. Cada día enriquezco mejor mi vida a través del servicio efectivo, del amor y de la práctica de todas las virtudes.

9. Mi dignidad personal me lleva a realizar las cosas que me competen con la máxima perfección posible.

10. Cada día, en todas formas y condiciones, en todos los aspectos de mi vida, estoy mejor y mejor a nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

11. Actúo con templanza, serenidad, autodominio y perfecto equilibrio en todo. Conservo plena autonomía y control sobre todas mis facultades físicas, mentales, emocionales, intelectuales y espirituales. Hecho está. (Visualizar un escudo protector de luz que te envuelve y protege; -una pirámide-).

12. Tengo fortaleza, valor, confianza y fe suficiente para triunfar y alcanzar todas mis metas, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y en armonía con sus planes cósmicos. Soy inmune e invulnerable a las influencias y sugestiones del medio ambiente y de cualquier persona a nivel físico, mental, emocional y espiritual, en las dimensiones objetivas y subjetivas y en cualesquiera otras en que sea requerido.

13. El orden universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión se establece en mi vida, en todos mis asuntos y en las personas interrelacionadas, aquí y ahora. Hecho está.

14. Asumo la responsabilidad de mis actos y cumplo bien todos mis compromisos, siempre oportunamente, de acuerdo con el orden cósmico.

15. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos da abundancia y armonía en el eterno presente. Vivo en abundancia y en armonía perfectas, aquí, ahora y siempre.

16. El Creador Universal, -ELOÍ-, se está ocupando de todo, en todos los aspectos de mi vida, y se expresa en mí conciencia intuitiva por medio de los sentimientos en correspondencia con los valores universales.

17. Gracias, Creador Universal, -ELOÍ-, por esta vida maravillosa. Que Tu Inteligencia Infinita, Amor, Sabiduría, Justicia, Luz, y Poder Creador guíen, adecuadamente, todas mis decisiones y acciones, ahora y siempre. Gracias, Eloí, por este día maravilloso.

18. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos proteja, aquí y en cualquier lugar, ahora y siempre. (Tres veces).

19. Siempre espero lo mejor, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y la Ley Cósmica, en armonía con todos.

20. Gracias, Creador Universal; todo va bien en todos los aspectos de mi vida, a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Eloí, todo va bien en mis practicas espirituales y en mi relación Contigo; Tú y yo formamos una unidad perfecta, armónica, aquí y ahora, en el eterno presente. Yo soy Tú, Tú eres yo. Te amo.

21. Voy a realizar –obtener o resolver- (mencionar), antes del: (fecha), de acuerdo al orden divino y en armonía con todos. (Si se trata de varios objetivos, anótelos y haga la afirmación y visualización con cada uno de ellos. Imagínelo concluido satisfactoriamente sin imponer canal alguno de manifestación.)

22. Tengo serenidad y calma imperturbable. Soy impasible frente a todo y a todos. No tengo temor a nada, a nadie ni de nadie en ningún nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero. Dentro de mí vibra la seguridad total. Tengo completa confianza en la vida y en mi propia capacidad de resolver situaciones y alcanzar los resultados satisfactorios que preciso, en cada caso, siempre.

A continuación anoté la fecha: Lunes 12 de agosto de 1967. Luego, tal como me lo indicó el Venerable hombre, anoté la fecha que correspondía veintidós días después: 03 de septiembre de 1967.

Acto seguido, me senté cómodamente, tomé tres respiraciones profundas y realicé la meditación.

Luego, cada noche, durante veintidós días, a las once en punto, me iba a mi cuarto, daba indicaciones de no ser interrumpido durante veinte minutos y realizaba la meditación del día, la cual, siempre complementaba con la lectura breve de uno de los libros de cabecera que siempre suelo tener en mi mesa de noche.

Iba notando, día a día como emergía de mi interior una nueva y desconocida fortaleza, seguridad, estado de ánimo contento, actitud más decidida, optimismo frente a la vida y a las situaciones; comencé a llevarme mejor en las relaciones con las demás personas, a ser más comedido en todo y sobre todo comenzaba a tener conciencia de cosas que antes me solían pasar desapercibidas.

Cabe destacar que, en el punto número veintiuno de la meditación, había anotado siete objetivos que desde hacía tiempo quería realizar y para mi sorpresa, treinta días después de haber terminado de efectuar la meditación del manuscrito número veintidós comencé a observar como, en forma aparentemente casual se iban manifestando la resultados de cada uno de ellos hasta que, algunos meses después, antes de la fechas previstas, los había realizado todos, menos dos, por lo cual, me senté y volví a anotar, en una hoja de mi cuaderno, otros diez objetivos, encabezados por los dos pendientes de la lista anterior, les puse la fecha tope a cada uno, antes de la cual debían ser logrados, para seguir visualizando, su logro, periódicamente.

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sábado, 8 de junio de 2013

BUSCAR, Y ENCONTRAR EL SENTIDO DE LA VIDA





BUSCAR, Y ENCONTRAR  EL SENTIDO DE LA VIDA


©Giuseppe Isgró C.



Una persona que se formula los planteamientos sobre las insatisfacciones de la vida, denota ser de un estado lúcido de conciencia. Que no trata de engañarse buscando excusas, sino de encontrarle un mejor sentido, aún, a la vida.

Se vive en un mundo donde, sin un conocimiento amplio de las leyes que rigen la vida, y de determinados conocimientos que trasciendan los límites de lo tradicional, se corre el riesgo de llegar a una etapa intermedia de la existencia con estados significativos de insatisfacción o descontento.

En esos estados de insatisfacción interior es donde se hace presente la acción pedagógica de Dios, dentro de la conciencia, hurgando en lo más íntimo del ser, para reorientar esa vida hacia el camino en el cual rige el plan que el mismo Dios estableciera, desde el inicio de los tiempos, para ese ser.

El estado de insatisfacción interior que se experimenta, ocasionalmente, es una de las cosas más maravillosa que le puede ocurrir a una persona, en un momento dado.

Se trata de un mecanismo extraordinario que Dios colocó dentro de cada ser –en los cuatro reinos naturales- para que no esté jamás totalmente satisfecho, para evitar que cada individuo se estanque. Con esto se asegura de que nadie jamás deje de progresar.

Hay que transmutar ese sentimiento interior de insatisfacción con nuevos objetivos exteriores, integrales de vida, que canalicen la fuerza creadora interna, en constante producción, hacia esas nuevas actividades que se correspondan con el auténtico plan de vida, que cada quien elaboró antes de nacer a este ciclo de vida, en la dimensión espiritual, que le aportan el sentimiento de auto-realización que anhela.

Dado que cada quien se encuentra, en un dado momento, en una fase intensa de realización, dentro de su plan de vida, esos sentimientos de insatisfacción son señales de alerta que el propio espíritu transmite a la conciencia, con el fin de que se emprenda una búsqueda que le conduzca al cumplimiento de la propia misión de vida.

El primer paso es aceptar la realidad tal como se presenta, y no evadirla. Al hacerlo con valentía, estará afrontando la realidad y brindando el apoyo necesario a todos los miembros del propio círculo familiar que lo precisan.

Esa es parte de la propia misión, y seguramente, del compromiso que cada quien adquirió antes de nacer, con cada uno de los miembros de su familia, de ayudarle a superar sus pruebas, por ser, evidentemente, un Espíritu más fuerte, o experimentado.

Allí está la oportunidad de crecimiento espiritual, en seguir brindando la ayuda a cada miembro de la propia familia.

Nadie podría, probablemente, ni siquiera imaginar lo que podrán hacer esas personas valiosas a quien se asiste, ahora,  por sus cooperadores, en el futuro. Porque la vida es una rueda que gira. Hoy se ayuda, mañana se será ayudados por esos mismos seres, ya que somos integrantes de una familia espiritual que vuelven a nacer juntos una y otra vez, para apoyarse en ese largo –eterno- camino de progreso sin límites en el eterno retorno del ser individual al ser universal.

Al término de este ciclo de vida, en la dimensión espiritual, la felicidad de los integrantes de una familia será inmensa, al observar culminadas con éxito las pruebas existenciales. Todos estarán  verdaderamente felices por haberse apoyado, y haber superado juntos los retos que se habían antepuestos como objetivos de aprendizaje.

Todo lo que se avanza en este ciclo de vida, todas las pruebas que se superan ahora, constituyen un trabajo menos que habrá que llevar a cabo mañana. Es tiempo ganado, aunque ahora pareciera tiempo perdido. Es el ejercicio para adquirir la fortaleza suficiente que requeriremos el día de mañana, en el tiempo perfecto, y siempre en presente, de Dios.

Es preciso expresar constantemente la gratitud al Gran Ser Supremo, como si las pruebas que se afrontan estuviesen ya superadas satisfactoriamente. Algo así: -Gracias Creador Universal, porque esta situación, en tus planes cósmicos, ya está resuelta-.

Sidharta Gautama, -Buda, o el iluminado-, quinientos años antes de nuestra era, tuvo percepción de esta realidad con una lucidez impresionante. En el primer mensaje dado a sus discípulos, en el Parque de los Ciervos, le dijo que la vida es sufrimiento, -o, como a nosotros nos gusta denominarle: INSATISFACCIÓN. El significado del término pali: “dukka”, que usó Sakyamuni significa, precisamente: insatisfacción.

Sakyamuni, -Sidharta Gautama-, en las Cuatro Nobles Verdades sostenía que la insatisfacción es producida por los deseos en su polaridad negativa.

Que es posible transmutar la causa de la insatisfacción, para que cese la misma.

Y, según él, la forma de transmutar esa causa que produce la insatisfacción es la de regir la propia vida aplicando las enseñanzas del Noble Sendero Óctuple, cuyas fases son: 1) Rectas opiniones; 2) Rectos propósitos; 3) Rectas palabras; 4) Rectas acciones; 5) Rectos medios de sustentamiento de vida; 6) Rectos esfuerzos; 7) Recta atención; y, 8) Recta concentración.

1)     RECTAS OPINIONES:

Para emitir rectas opiniones de requiere tomar decisiones acertadas, eligiendo entre diversos puntos de vista, el que mejor exprese el justo sentido del tema sobre el que se emite el juicio.

Empero, para tomar decisiones acertadas, es preciso tener el conocimiento adecuado, necesario y suficiente, lo cual implica una búsqueda y un estudio constante de la Doctrina Universal, es decir: todas las corrientes válidas de pensamiento y las obras de los más importantes pensadores de todos los tiempos, por ejemplo:

Homero, -el maestro de Alejandro Magno, por la lectura de sus obras la Ilíada y la Odisea, las cuales se las sabía de memoria-; le facilitaron el desarrollo de su visión de líder y a adquirir un amplio dominio de los valores universales. Además,  el gran macedonio, en forma presencial, tuvo por instructor  a Aristóteles. El estagirita le ayudó a forjar su pensamiento de estadista, en cuyas funciones el discípulo descolló con efectividad, difundiendo la cultura helénica, fomentando el cruce étnico entre los griegos y los pueblos conquistados, ya que obligaba a sus hombres a casarse con las mujeres, en vez de tomarlas como esclavas, entre un sinnúmero de aspectos  geopolíticos más.

También, es preciso incluir entre los autores de obligada lectura, a: Platón, el mayor filósofo de todos los tiempos; Plutarco, el maestro de Queronea, otro de los grandes griegos que más ha influido en la formación de los líderes a partir del siglo II de nuestra era. Séneca, Cicerón y Plotino, son mentes lúcidas cuyas obras ayudan a forjar una óptima visión de la vida. Cervantes, con el Quijote y las Novelas Ejemplares, constituye un maestro para todos los tiempos. Napoleón Hill, con su obra: PIENSE Y HÁGASE RICO, ha cambiado la vida de millones de personas en todo el mundo. Pero, no se vaya a pensar que éste es un libro que trata solamente de la riqueza material. Hay otras clases de riquezas donde la material es irrelevante, aunque necesaria y valiosa, y esa obra extraordinaria ayuda a percibirlas.

Al término de cada ciclo de vida, la mayor riqueza que cada quien se lleva consigo es todo el bien que realiza. El bien que se ha efectuado es el único del cual derivará bendiciones y compensaciones, y cuyo saldo conformará la propia SUMA EXISTENCIAL.

Esa suma existencial le ubicará, o reubicará en su nuevo orden de vida.

Ese orden de vida donde podrá seguir sirviendo en los planes de Dios, cumpliendo su voluntad, constituye la mayor riqueza, ya que permitirá expresar los propios estados de conciencia, en la realización de los objetivos asumidos en la gran obra universal, en la cual, a cada quien, le toca  cooperar, sin excepción. Es una cooperación voluntaria, regida por el mecanismo de las necesidades, de los deseos, de las propias aspiraciones y ambiciones personales, y por los valores universales, soportes de la sabiduría de la ley cósmica impresa en la conciencia de cada ser, en los cuatro reinos naturales.

Pero, se recibe, en cambio, el Salario Cósmico, justo y perfecto, ya que el pagador, que es Dios, es la expresión perfecta de la justicia.

Siempre paga, por la ley cósmica, de acuerdo al propio merecimiento. Luego, en forma inmediata asigna, a cada quien, la obra que sigue en sus planes universales, y en los que trazó para cada ser.

Pitaco, uno de los siete sabios griegos, en cierta ocasión en que todos se afanaban para salvar sus cosas personales, recibió esta pregunta de un amigo: -“Y tú no vas a salvar tus cosas?

-Pitaco, le respondió: -“Todo lo llevo conmigo”.

Esas son las únicas riquezas que valen: Conocimiento, experiencia, virtudes, buena voluntad, capacidad de dar, -y de recibir-, amor, sentido de lo justo, fortaleza, templanza, autodominio, lucidez mental, o visión, tolerancia, capacidad de perdonar, -y de auto-perdonarse-, amistad, y un largo etcétera de valores intangibles físicamente, pero no menos tangibles espiritualmente.

2)     RECTOS PROPÓSITOS:

 La vida de Bolívar se transformó desde el mismo instante en que se forjó el propósito de libertar a Latinoamérica del dominio español, en el Monte Sacro, en Roma, donde se encontraba en compañía de su maestro: Simón Rodríguez.

Años después, Simón Rodríguez diría, refiriéndose a Bolívar: -“Y el chaval cumplió su palabra”.

Es preciso forjarse claros propósitos de vida y nuevos objetivos a corto, mediano y largo plazo, por escrito, en todos los ámbitos existenciales.

Ejercicio de gratitud: Hay que expresar gratitud a la vida, y a Dios, en todo momento.

Anotar, ahora, en una hoja de papel, por lo menos cien cosas buenas por las cuales cada quien pueda expresar gratitud a Dios y a la vida.

Se sorprenderá, cada persona, como a medida que va escribiendo, le van surgiendo en la propia mente, mayor número de motivos por los cuales  expresar gratitud. Es la ley de asociación de ideas, y una manifestación activa de la ley de atracción: Se vuelve a crear lo que se recuerda, y por lo que se expresa gratitud.

Ahora es un excelente momento para inscribirse en una universidad para cursar la carrera con la que siempre soñó, aunque ya tenga una. O, para seguir estudios de post grado: Especialización, Magister, o Doctorado. Sea cual fuere su edad actual, es la mejor edad para hacerlo.

Forjase el propósito de independizarse económicamente. Instale un nuevo negocio, o  sucursal de su empresa en otra ciudad. Es solo un ejemplo, o una idea.

Esa energía creadora interna que busca expresarse, en cada quien, es preciso canalizarla mediante la programación de objetivos exteriores, por escrito. Caso contrario, ella buscará de expresarse de cualquier manera, y la forma principal en que suele hacerlo, es la de la insatisfacción, o frustración.

Es un mecanismo extraordinario elaborado por Dios para permitir el progreso de los seres humanos y evitar el estancamiento existencial.

El ser humano posee el poder potencialmente infinito para resolver cualquier situación que se le presente y para realizar cualquier propósito, u objetivo, siempre que lo aborde uno a la vez, por su estricto orden prioritario.

3)     RECTAS PALABRAS: En todo momento hay que expresar palabras de sabiduría. Las palabras de mayor poder son: Gracias; te amo; perdóneme; en qué puede servirle; cómo puedo ayudarte; que bien lo has hecho; te felicito; gracias por tu ayuda; gracias por tu amistad; gracias a Dios porque esto ya está resuelto; gracias a Dios, porque esto ya está realizado.

4)              RECTAS ACCIONES: El sentido de la justicia, la equidad, el amor, el cumplimiento del propio deber, la sinceridad, la excelencia en el propio trabajo, la bondad y la generosidad, entre otros valores que aportan la perfecta visión de las cosas, deben guiar las propias acciones en la realización de los propios objetivos.

5)              RECTOS MEDIOS DE SUSTENTAMIENTO DE VIDA: Hay que vivir con medios honrados de vida, no solamente sin quitarle nada a nadie, sino dando a cada quien lo suyo, bien sea el dinero que le pertenezca, el triunfo que le corresponda en una contienda de cualquier índole, deportiva o comercial. Es preciso ir por la vida con la frente alta, y que nadie pueda decir que el bocado que, cada día, una persona se lleva a la boca, no lo haya ganado con su trabajo honrado. Es mejor vivir una vida sencilla por propio mérito a una vida suntuosa inmerecida. Como decía William Blake: -“Nadie vuela demasiado alto si lo hace con sus propias alas”-. Es mejor ser que aparentar. Frente a la impostura de las apariencias, es mejor ser auténtico, ser lo que cada uno es, sin avergonzarse por ello, al contrario, hay que estar orgulloso, u orgullosa, por ser quien se es: Una expresión de la Divinidad.

6)               RECTO ESFUERZO: A qué sirve desplegar un esfuerzo descomunal para tener diez viviendas, cuando se necesita una buena para vivir, o a lo suma, dos, incluyendo la vacacional, o segunda vivienda para el descanso de los fines de semana, en la playa o en la montaña.

7)               RECTA ATENCIÓN: En lo que se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. No se puede prestar atención a dos cosas al mismo tiempo. No se pueden recorrer dos caminos, simultáneamente. No se puede estar en dos sitios al mismo tiempo. Es preciso centrar la atención en lo que se hace, para hacerlo bien.

8)               RECTA CONCENTRACIÓN: Recuerde el poder la lupa, -o lente de aumento-: Al canalizar los rayos del sol en un punto, en él se concentran los rayos del sol, produciendo la combustión. El secreto supremo es la concentración de esfuerzo, de energía, de recursos, en la realización de un objetivo prioritario a la vez. Se posee el poder potencialmente infinito para resolver una cosa a la vez, para realizar un objetivo prioritario a la vez.

Estos ocho pasos del Noble Sendero Óctuple, constituyen una magnífica percepción de Sidharta Gautama para transmutar la insatisfacción en sentimiento de auto-realización.

Es preciso recordar que la sabiduría de Sócrates residió en percibir su propia ignorancia, -la docta ignorancia-, cuando expresó: -”Yo sólo sé que no sé aquello que no sé”. Aunque, evidentemente exageró algo, ya que no parecería probable que él supiera todo lo que ignoraba. Para conocer todo lo que se ignora habría que ser Dios, ya que el aprendizaje es para toda la eternidad, sin que jamás se encuentre un límite.

Empero, cuando la pitonisa del Oráculo de Delfos lo eligió como el hombre más sabio de Grecia, él se sorprendió, y mencionó a unos cuantos contemporáneos suyos que, en su opinión, eran más sabios que él. Al visitarlos, en compañía de sus discípulos, y hacerle las preguntas de rigor en que él consideraba que le superaban en conocimientos, comprobó que la mayoría creían saber más de lo que realmente sabían. Algo similar ocurre hoy, con la mayoría de las personas que, al dominar un determinado arte, creen ser competentes para opinar, con autoridad, sobre cualquier tema que se le anteponga.

Entonces, la conclusión a la cual llegó Sócrates, era que la pitonisa, la única razón por la cual debió haberlo elegido como el hombre más sabio de Grecia, era no porque él supiese más que los otros, sino por la pequeñísima nimiedad de que, aun cuando él igualmente no sabía,  tal como le ocurría a los otros, sin embargo se daba cuenta, y estaba consciente de que no sabía.

Al afrontar la vida, en el día a día, la timidez es un rasgo detrás del cual se descubren grandes caracteres, o personalidades. El tímido es introvertido; el introvertido es un pensador más profundo; el pensador más profundo ve las cosas con mayor claridad o profundad, y llega un momento en que su timidez se transforma en seguridad, convicción y entusiasmo. Entonces, en el momento en que descubre su poder, ya nada ni nadie podrá inhibir su tremendo poder creador y su capacidad realizadora.

Aristóteles Onassis, sugería practicar algunas artes marciales, afirmando que en poco tiempo se controlarían esas sensaciones de timidez, y se adquiriría mayor seguridad en la expresión de las propias actitudes frente a la vida.

Diez respiraciones profundas contando hasta veinticinco, mentalmente, ayuda para adquirir seguridad y confianza en sí.

El ejercicio de mirarse en el espejo, en el entrecejo, cada noche, antes de dormir, o en la mañana, al levantarse, repitiéndose 30 veces, o más: -“CADA DÍA, EN TODAS FORMAS, ESTOY MEJOR Y MEJOR”, es la forma más rápida de tomar el control de la propia mente y pensamientos.

Un tercer método excelente para adquirir un total control de la propia mente, y pensamientos, es el de concentrarse, durante un breve lapso, aumentando el tiempo en forma gradual hasta un máximo de quince minutos, sobre la luz de una vela, repitiendo el mismo lema: -“CADA DÍA, EN TODAS FORMAS, ESTOY MEJOR Y MEJOR”, y cualquier otra fórmula auto-sugestiva sobre cuya cualidad, aptitud o destreza se quiera alcanzar un óptimo desarrollo.

Casi todas las personas exitosas han sido, inicialmente,  sus mayores críticos, en cuanto a sus dones, aptitudes, coeficiente intelectual, etcétera, etcétera, muchas veces dejando de apreciar sus propios dones. Es preciso desarrollar un sólido auto-concepto, una poderosa auto-imagen, y una elevada auto-estima. Para ello es preciso auto-respetarse, y por ende, respetar a cada ser con quien se entra en contacto, diariamente, en los cuatro reinos naturales.

Dentro de cada ser late la misma DIVINIDAD, sin dejar de ser la DIVINIDAD, y sin haberse separado de la DIVINIDAD.

Cada ser posee un Espíritu eterno e inmortal, dotado de la misma conciencia de la DIVINIDAD, réplica exacta de la DIVINIDAD, en la cual se expresa la DIVINIDAD, con el lenguaje de los sentimientos de los valores universales (atributos divinos), QUE ES LA SABIDURÍA INNATA, en cada ser de los cuatro reinos naturales: humano, animal, vegetal y mineral.

También, ese espíritu eterno e inmortal está dotado del poder creador potencialmente infinito de la DIVINIDAD que se expresa, gradualmente, a medida que la persona vaya afrontando necesidades en cada día de su existencia, en el eterno presente.

Mientras más grandes sean las necesidades, en mayor grado, y en forma equivalente, expresará ese mismo poder potencialmente infinito que posee.

Quiere decir, que siempre se poseerá el poder suficiente para resolver cualquier situación que se afronte, siempre y cuando se haga, con decisión firme, con determinación de triunfar.

Si se afronta una situación es porque se está en condiciones de superarla, caso contrario, la situación habría dejado de presentarse.

Hay que ver más allá de las apariencias. Dios esconde las grandes oportunidades –grandes tesoros- dentro de las situaciones que va presentando en la vida diaria. CONSTITUYEN LA NUEZ DENTRO DE LA CÁSCARA. Hay que ver más allá delas apariencias, y preguntarse: -Qué cosa buena Dios nos quiere aportar con esta situación? –De qué nos está protegiendo? –Qué aprendizaje debemos recabar? –Qué oportunidad de crecimiento contiene? –Cómo se puede resolver esto? –Cómo se puede alcanzar esta meta? –Qué se puede hacer, o, qué se debe hacer?

Los maestros sufíes, tienen un lema que lo expresan así: -“Lo que Allhah quiera; nada se le asemeja”. –Qué es lo que Allah quiere? –Allah quiere, por la Ley Cósmica, valores universales o atributos divinos, lo mejor, lo justo y perfecto, lo hermoso, lo digno, lo honesto, y sobre todo que se le deje hacer su trabajo como Él sabe hacerlo, sin pretender darle instrucciones a Dios de como Él debe hacer las cosas. Si subordinamos nuestros pensamientos, sentimientos, deseos, palabras y actos a la sabiduría de los valores universales, o atributos divinos impresos en la propia conciencia, réplica de la conciencia de la Divinidad, las cosas se expresan de una manera justa y perfecta, en armonía con todos, en el tiempo perfecto de Dios, siempre. Es preciso ser un instrumento de la voluntad divina y vivir en perfecta armonía con ella.

De qué mal mayor no estará apartando Dios a una persona, por la Ley Cósmica, con un mal menor, y qué bien no le traerá éste?

Como dice el dicho: -“No hay mal que por bien no venga”.

Los sufíes practican el Dzikr, es decir: El constante recuerdo del nombre de Dios.

Repiten el nombre de Dios por lo menos mil veces al día. Es una fuente de poder. Donde se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. Esta técnica permite la conexión con la Divinidad, y elevarse a un grado vibratorio muy elevado, de perfecta armonización. Al vibrar a una frecuencia más elevada, las de la vida diaria, de rango más rudimentario dejan de afectar, ya que los opuestos jamás se juntan. Al vibrar en una frecuencia más elevada, por efecto de la resonancia magnética, se transmuta el entorno depurando el ambiente, atrayendo lo análogo, y repeliendo lo desemejante. Al encender la luz de la conciencia, se evacua la oscuridad por si sola.

Todos los grandes hombres –y mujeres-, de la humanidad, han alcanzado sus mayores éxitos después de importantes fracasos. Nadie puede declararse vencido mientras su voluntad, firme, le empuja a seguir adelante. Después de la tempestad viene la calma, y el buen tiempo.

Además, es la ley de la vida, SEGUIR ADELANTE.

En el momento en que una persona se niega en abandonar, es el instante en que se activan los poderes creadores de la mente y comienzan a surgir cosas maravillosas: coincidencias que aportan los resultados apetecidos.

Eso ocurre en el momento más crítico de la vida, o de las situaciones. Es como decir: En la noche más oscura, brillan más intensamente las estrellas; después de la tempestad, sale el arco iris. A medianoche en punto, un segundo después, empieza el nuevo día.

La improvisación se resuelve con estudio, leyendo libros especializados, asistiendo a cursos, seminarios, etc. Un vendedor exitoso lee un libro semanal de ventas, de psicología, o motivación, etc. Un abogado, estudia dos o tres horas al día para ser un mejor abogado; y así sucesivamente.

Tomás Alva Edisón, patentó más de mil inventos, y gracias a él tenemos la bombilla eléctrica, entre otros creaciones. Fue calificado por su maestra, quien lo expulsó de la escuela, según ella, por inepto para los estudios. Pero, su madre, que veía con mayor claridad, le respondió que ella se encargaría de su educación. Edisón no fue a la escuela, pero demostró ser un genio. Tenía 60.000 libros en su biblioteca, en todos los temas de su interés. Era un asiduo estudioso con una curiosidad insaciable.

Recordemos que Edisón probó más de 10.000 filamentos para perfeccionar la bombilla eléctrica. Qué hubiese ocurrido si en la prueba 5.000 hubiese abandonado, considerándose un hombre fracasado?

Henry Ford, el hombre más rico de su tiempo, fue acusado, en cierta ocasión, por un periodista, de ignorante. Pero él se defendió diciendo, después de escuchar divertido las razones que aquel esgrimía en su contra: -“En mi escritorio tengo una serie de botones, que, cuando necesito conocer algo, aprieto uno de ellos, y al instante aparece un ingeniero de mi staff que me responde cualquier pregunta, sobre el tema técnico que preciso conocer en ese momento. El juez de la causa, entendió, por esa razón, de que Ford no era un ignorante. Sabía lo que quería y como conseguirlo, y contrataba a todas las personas que pudiesen serle útiles para sus propósitos comerciales.

Y además, Ford se reunía con otros genios como él: Harvey Firestone, Luther Burbank, Andrew Carnegie, Tomás Alva Edisón, Napoleón Hill, entre otros. Ford era el que mejores sueldos pagaba, a sus trabajadores, para lograr disponer del personal más cualificado, con lo cual disponía de la lealtad de los mismos, ya que cuidaban un trabajo que sólo él le ofrecía en ese nivel.

La gente con ímpeto creador jamás considera que haya fracasado porque se demore la realización de un proyecto. Si las cosas no funcionan de una manera, prueban de otra, hasta conseguir que funcionen, aunque pasen una eternidad para obtenerlo. Siempre tienen una curva de resultados claramente definida, con el tiempo previsto dentro del cual, en forma razonable es factible alcanzar los resultados anhelados. Jamás abandonan a mitad de camino, ya que, cuando las cosas se ponen menos fáciles, saben que es el momento en que están más cerca de alcanzar su propósito. Persisten, incansablemente, tenazmente. Bolívar era más Bolívar cuando las cosas se ponían en su situación menos fácil. Conservaba la serenidad y la idea clara de los resultados que buscaba alcanzar. Lo demostró en Casacoima y en Pativilca, entre otras circunstancias. En la primera, saliendo de una situación emergente, y en forma providencial, soñando con la Campaña del Sur, para emancipar a Latinoamérica, cosa que, efectivamente, luego realizaría con éxito. En la segunda, en condiciones adversas, respondiendo al General Mosquera, a una pregunta sobre lo que pensaba hacer: -“Triunfar”, le dijo, con vivo tono de voz, y seguridad en lo que decía, pasando, acto seguido, a explicarle la forma en que pretendía hacerlo, lo cual, posteriormente, llevó a cabo con absoluta precisión.

Michele Isgró Scibilia, un siciliano que inspiraba a toda persona que le trataba, con la excelencia de los valores que les eran inherentes, de honradez, fortaleza, sinceridad, tenacidad, confianza en sí mismo, tenía un lema de profunda sabiduría y poderoso estímulo: -“Cuando el mundo parece que se acaba, comienza de nuevo”-.

Evidentemente, cada mañana empieza un nuevo día y con mente fresca las cosas se ven con mejor talante y mayor dominio creador.

Recordemos, una vez más, para concluir, la fábula del rosal, de Niko Kazantzakis, por su hermosa moraleja: -“Un día, las ortigas pidieron al rosal: -Señor rosal, ¿no quieres enseñarnos a nosotras también tu secreto? ¿Cómo te ingenias para hacer las rosas? Y el rosal respondió: -Hermanas ortigas, mi secreto es muy simple. Durante todo el invierno, con paciencia, confianza y amor yo trabajo la tierra y solo tengo una cosa en mi mente, la rosa. Las lluvias me azotan, los vientos me deshojan, las nieves me cubren, pero yo solo una cosa tengo en mi mente, la rosa. Éste es mi secreto, hermanas ortigas”.

Adelante.

INSATISFACCIÓN CREADORA O DESCONTENTO DIVINO

Bolívar y su inspiración en el Chimborazo

INSATISFACCIÓN CREADORA
O DESCONTENTO DIVINO

©Giuseppe Isgró C.


El ser humano, al igual que todos los seres en los demás reinos naturales, son productores constantes de energía creadora que busca expresarse en dos vertientes: en primer lugar, para satisfacer las necesidades en todas sus variantes: básicas, de seguridad, afectivas, de estimación, de autorrealización y de conexión espiritual con la fuente universal. La segunda vertiente, es para la realización de los objetivos, personales o profesionales, en todos los ámbitos existenciales.
Mientras la persona no tenga una necesidad imperiosa que satisfacer, problema que resolver, u objetivo que alcanzar, a corto, mediano y largo plazo, la producción de energía creadora, al no encontrar salida hacia el exterior, por cuanto la persona no tiene objetivos establecidos como metas, ni necesidades imperiosas ni problemas que resolver, por las múltiples razones que fueren, por ausencia de motivación, por no saber lo que quiere, etcétera, entonces, la persona, en vez de afrontar la realidad, y superarla, la evade. Entonces, la energía busca un escape hacia dentro, y se expresa como insatisfacción.
 La psicología humanística de Abraham Maslow, y su escuela, la denomina INSATISFACCIÓN CREADORA, por cuanto, al igual que el agua en una represa, bloqueada por un dique, se va acumulando, hasta que llega el momento en que la fuerza del agua se haga incontenible y rompa el dique.
La energía creadora, llega el instante en que induce a la persona a la acción. Esto, realmente, en la práctica tiene fácil aplicación: por una parte, al agravarse la situación por resolverse, la persona es impelida a la acción: Cuando tiene hambre, tiene que comer; para adquirir los recursos, debe trabajar. Si tiene frío, tiene que cobijarse.
Las necesidades sociales, de ser aceptado en un grupo, le hacen formar familia, a buscar trabajo, a ingresar en un centro de formación profesional, en un club, etc.
 Las necesidades de estimación, propia o ajena, le llevan a realizar obras ejemplares para granjearse su propia estima y la de los demás.
Se puede transformar la insatisfacción creadora por medio de: primeramente: anteponiéndose objetivos por escrito.
Desde el instante en que la persona se antepone los objetivos por escrito, la energía creadora se canaliza hacia el logro de los mismos, produciendo una sensación de bienestar y un sentimiento de autorrealización. En segundo lugar, es preciso tener presente que: desde el momento en que se afronta una situación por resolver, es porque se está en condiciones de resolverla, caso contrario jamás se habría topado con ella.
Al tomar la decisión de afrontar cualquier situación que requiera solución, automáticamente, comienzan a aflorar las ideas y la energía creadora suficientes tendientes a su total y satisfactoria solución.
Esta genial percepción de Abraham Maslow, la tuvo, también, cinco siglos antes de nuestra era, Sidharta Gautama, cuando en el Parque de los Ciervos, da su primer discurso, hablando de las Cuatro Nobles Verdades.
Allí, él explica la insatisfacción que el ser humano experimenta, la cual denomina con el término pali, “dukka”, que significa insatisfacción, y que algunos traductores denominan “sufrimiento”. Atribuye la causa de la insatisfacción a los deseos en polaridad negativa.
Aporta una palabra de aliento, al afirmar que es posible erradicar la causa de la insatisfacción, y muestra, de manera contundente, que la manera adecuada de transmutar la insatisfacción –o sufrimiento-, es la aplicación del Noble Sendero Óctuple, es decir: Rectas opiniones, rectos propósitos, rectas palabras, rectas acciones, rectos medios de sustentamiento de vida, recto esfuerzo, reta atención y recta concentración. Es una percepción realmente genial y su aplicación transforma la vida de cualquier persona, desde un estado de insatisfacción, que es, virtualmente constante, hasta el de su transmutación, en estado de autorrealización o felicidad.

jueves, 6 de junio de 2013

EL SECRETO DE DAR


EL SECRETO DE DAR


©Giuseppe Isgró C.



Desde los tiempos antiguos, la humanidad  ha sido condicionada con el principio de dar, como fuente de riqueza.


Quienes comprenden este principio de dar y lo aplican, comprueban que es efectivo. Muchos se enriquecen, otros viven más felices o, simplemente más prósperos.

El secreto de dar es que  proporciona motivo de vida e imprime sentido direccional a  la misma.

Algunos lo aplican dando el diezmo; es decir, la décima parte de lo que ganan. Otros, dan servicio, dedicación, amor, conocimiento, estímulos, productos, etc.

La oferta aplicada constituye el secreto de dar, sobre todo orientada hacia la demanda pasiva o potencial, cuyas necesidades crean toda la oferta que se requiere como fuente de intercambio, bienestar y riqueza.

¿Cuales son las necesidades que es preciso satisfacer? ¿Dinero, amor, compañía, prestigio, auto-realización, etc.? Abre la puerta de tu vida para dar a otros lo mismo que tu requieres: Dinero, a través del servicio  y asesoramiento efectivo; amor genuino y abundante, compañía  amistosa o afectiva, interesándose por los demás en una acción social útil, etc., prestigio, por medio del reconocimiento sincero de la labor cumplida por otros, dando el elogio justo en cada caso. 

La auto-realización  se alcanza orientando el propio desarrollo en dirección de convertirse en la persona que se anhela ser, construyendo en lo interno, para alcanzar  mayor capacidad de construir en lo externo, haciendo la mayor suma  de bién posible a la humanidad, por cuanto, tu aporte es útil a la sociedad  y sobre tus hombros reposa parte del peso del mundo.

Da lo mejor de tí mismo a partir de hoy, sin preocuparte de la compensación. Todo acto tiene en sí mismo su compensación, dijo el gran sabio Ralph Waldo Emersón.

Da el mejor servicio a la empresa donde prestas tus servicios, aunque pienses que te pagan menos de lo que  mereces. Si estás en un cargo público, la mejor forma de progresar es prestando  un servicio excelente, con probidad, por cuanto ésta no pasa desapercibida y cada vez te confiarán cargos de mayor jerarquía y responsabilidad; y,  siempre, tus servicios serán  apreciados.

Si eres médico, abogado, ingeniero, empresario, magnate, comerciante, ejecutivo, educador, estudiante, ama de casa,  oficinista,  vendedor profesional, etc.,  a nadie escapará  que estás ofreciendo un servicio con excelencia, con lo cual generarás medios recíprocos  portadores de más riqueza y plenitud de vida.

Toda oferta crea su demanda. Dando lo que otros necesitan se recibe lo que se anhela. 

Adelante.




ALIENTO CÓSMICO


ALIENTO CÓSMICO

©Giuseppe Isgró C.



Al realizar objetivos claramente definidos y programados, en el espacio y tiempo, o, enfrentar situaciones para resolverlas, se dispone, internamente, de un aliento cósmico que empuja a seguir adelante, hasta alcanzar la meta prefijada.

 Es la fuerza creativa interior que busca expresarse, en todo momento, de la mejor forma posible. Una pelota, sumergida en el agua, siempre emerge a la superficie.

Una semilla introducida en la tierra, germina y la nueva planta crece saliendo al exterior. Tanto la pelota como la semilla, están dotadas de una fuerza, aliento, que han absorbido del medio ambiente, la cual le imprime el dinamismo necesario para mantenerse a flote o, crecer adecuadamente según el fin natural de cada especie.

La ley cósmica, expresa...  “Todo ser absorbe el aliento cósmico, energía o vibraciones electro-cósmicas, en grado proporcional a las aspiraciones existenciales, en un momento dado”.

Para optimizar el poder creativo se requiere centrarlo al igual que los rayos del sol a través de una lupa, en un minúsculo punto u objetivo, a la vez, para encender la llama de la realización.

 La fuerza del aliento cósmico potencia al ser para alcanzar el éxito en cualquier propósito.

 En la medida en que, los objetivos son más elevados, la sintonía mental con dichos resultados, lleva a la persona a respirar de una manera diferente que lo carga de la vitalidad  requerida; paralelamente, existe una especie de respiración anímico espiritual, la cual aporta la energía psico-mental en grado suficiente y equivalente a la magnitud de la tarea por realizar.

 La propia dinamo psico-mental, al requerir mayor carga de energía cósmica, se conecta, automáticamente, con la dinamo cósmica, cargándose con la potencia requerida.

 Por eso los antiguos decían... “Hazlo y tendrás el poder”; el poder para hacerlo.

 Mientras más elevadas las metas, se aspira mayor cantidad de aliento cósmico, casi en forma imperceptible, pero real y efectivamente.

 Cuando existen diferentes objetivos  por realizar, para aprovechar al máximo la potencia del aliento cósmico que dinamiza la voluntad realizadora, se requiere planificar, los resultados apetecidos, en base a un estricto orden prioritario, por escrito, realizándolos uno a la vez.

 Desde el acto de planificar, a la realización de los resultados que deben ser alcanzados, existe un trecho en cuyo recorrido el aliento cósmico, acompañado de esa fé que mueve montañas, es el fuego constante que permite persistir, tenazmente, en pos de las metas hasta alcanzarlas una y otra vez, siempre a niveles más elevados. Mientras más lejanos parezcan los resultados, más intensamente debe ser concentrado el aliento cósmico en un pequeño punto de realización a la vez.

 Con cada logro se gana en confianza, acrecentándose el poder de la fe, en la vida, en los principios cósmicos, sus leyes y valores universales, en sí mismo y en los demás aplicando siempre las regla de oro de “hacer a los demás lo mismo que se gustaría recibir”. Mientras persista un ciclo existencial, el aliento cósmico manifestará siempre su potencia empujando al cumplimiento de la verdadera misión en la vida. A medida que los objetivos alcanzan niveles más elevados y se asume mayor grado de compromiso social, se crea, en cada uno, la necesidad de absorber el aliento cósmico, en la magnitud precisada.

Casi imperceptiblemente, cada ser va adoptando la actitud mental correcta y creando modificaciones psicosomáticas, en sí mismo, e indirectamente, influye en la modelación del medio en que se desenvuelve, donde, desde el ritmo respiratorio que permite acumular, manteniendo mayor potencia vital, hasta el aliento cósmico, que por la sintonía psico-mental establece a nivel psiconsciente con las mentes capaces de cooperar, se van abriendo canales mentales a través de los cuales las fuerzas cósmicas se manifiestan para realizar los propósitos universales.

 El místico ve, el sabio comprende, la persona de éxito ve, comprende y realiza, actuando en consecuencia, logrando los resultados que le permiten el grado de compromiso social asumido en las tareas cósmicas, acorde con las propias fuerzas, capacidades y visión existencial.

 El aliento cósmico suficiente está presente para secundar la obra iniciada.

 Mientras más altas las aspiraciones personales de cada uno, debe esforzase en mayor grado y en ese esfuerzo va absorbiendo el aliento cósmico requerido.

 Si las aspiraciones son elevadas la carga de aliento cósmico es equivalente. Si la fuerza acumulada es excesiva, la naturaleza desarrolla paralelamente grandes virtudes para equilibrar los resultados.

Adelante.



SEMILLAS DEL ÉXITO: -“Los pensamientos son semillas que germinan en el jardín de la vida, donde se cosecha tanto más de lo que se siembra”.- Giuseppe Isgró C.


SEMILLAS DEL ÉXITO

©Giuseppe Isgró C.


-“Los pensamientos son semillas
que germinan en el jardín de la vida,
donde se cosecha tanto más de lo que se siembra”.-
Giuseppe Isgró C.



Por los frutos se identifica el árbol, así como por los resultados se evalúa la acción desplegada en todas las realizaciones humanas.

Según el tipo de cosecha deseada, se cultivan los árboles. En base a éstos, se seleccionan las semillas, el terreno  y la época del año, más convenientes. Luego, se aporta el TRABAJO DECIDIDO, el abono de la tierra, su riego y cuido. Al final, GERMINA LA SEMILLA, emergiendo del seno de la tierra, transformándose en planta, arbusto o árbol, produciendo los frutos apetecidos. El agricultor experto corrige y crea las condiciones mejores y, obtiene, CON SU ESFUERZO, PACIENCIA y CONSTANCIA, los resultados anhelados.

Si deseas riqueza integral, salud, armonía, abundancia, sabiduría,  felicidad y poder, debes sembrar los pensamientos adecuados a través de la autosugestión y visualización creativa, por cuanto, ellos son semillas que germinan y, al desarrollarse, darán sus frutos respectivos.

Para erradicar,  del terreno de tu mente, árboles que  te insatisfacen, solo te bastará sembrar las nuevas semillas de los frutos que anhelas cosechar.

Siembra pensamientos positivos y, mantén, en la mente, las ideas claras de los resultados esperados, con la confianza y fe de que serán logrados. Agrega ENTUSIASMO, DEDICACION, TENACIDAD Y DETERMINACION DE TRIUNFAR CADA VEZ MAS Y MEJOR.

Cultiva, desarrollando, las acciones y estrategias que, al crecer los NUEVOS FRUTOS del hombre más exitoso en que te transformas, gradualmente, crean, en ti, el panorama fresco de una existencia  sosegada, de paz, felicidad, armonía, luz, equilibrio y orden, bienestar y poder, sabiduría y riqueza, éxito y autorrealización, vida abundante, vigor, madurez, gozo, quietud mental y amor.

En la naturaleza, cada semilla da su fruto, y viceversa.

Cada logro que alcanzas, contiene, en sí mismo, las semillas de las nuevas realizaciones.

Si eliges adecuadamente, los frutos de tu vida serán los que apeteces.

Define, asumiéndolos, los objetivos que debes alcanzar. El mecanismo de la propia computadora mental realizará el resto, sí con confianza, persistes en la acción.

Ralph Waldo Emersón, dijo: -“Toma lo que quieras y paga el precio”. Puede ser de cualquier índole: dinero, dedicación, tiempo, esfuerzo, prestigio, etc. Deja de aspirar a la obtención de logros sin pagar el respectivo precio.

Las reglas sugeridas, son:

1.      En cada situación, cerciórate de cual es el precio, para ver si  puedes o estás dispuesto de pagarlo.

2.      Deja de tomar algo cuando rehúsas pagar su precio; por cuanto, sí lo tomas e impagas, adquieres una deuda que causa intranquilidad en la conciencia, e implica, siempre, un pago. Recuerda, todo tiene su precio y hay que pagarlo.

3.      Cuando comprometes tus esfuerzos en un proyecto, propio o ajeno, averigua, antes, sí los demás están en disposición y desean pagar lo que valen tus servicios, en caso contrario, deja de realizar el trato. Desempeña tus funciones, profesionales o técnicas, únicamente con aquellos que están dispuestos de pagar el precio. Es fundamental tener claro, en la mente, el resultado final que se obtendrá cuando se haya realizado la acción.

4.      Tú, formas parte de un  plan universal, por lo cual, al lograr formas más efectivas para alcanzar resultados con el menor costo posible en cuanto a esfuerzos, energía, tiempo y recursos, te constituyes en un mejor canal de expresión  de la Inteligencia Divina para alcanzar logros que, además de aportar beneficios en lo personal, contribuyan a la realización de objetivos universales, en bien de la humanidad.

5.      ¡Tú puedes, sí quiere! Todo va bien. Adelante.


Afirma:

Tengo valor. Dentro de mí vibra la seguridad. Tengo confianza en mí mismo y en mis propias  aptitudes. Cada día, aumenta más y mejor mi capacidad de trabajo, de estudio y energía creativa.  Mantengo en mí vida un perfecto equilibrio físico, mental y espiritual, salud y fortaleza.

Mi serenidad, calma y tranquilidad aumentan cada día más. Tengo las ideas claras de los resultados, objetivos y metas que debo alcanzar a corto, mediano y largo plazo.

Administro, con efectividad, mi tiempo, actividades y finanzas.

Cada día, establezco, claramente, las prioridades a las cuales debo concentrar todo mi esfuerzo y energía creativa. Las ideas que necesito surgen claramente en mi mente y estoy, en todo momento, en el lugar adecuado, desempeñando las funciones correctas y en contacto con las personas que pueden coadyuvar a las realizaciones de mis objetivos.

Me pongo bajo la inspiración divina para que pueda ser cada día mas útil en el desarrollo de los planes del Gran Arquitecto del Universo, al bienestar colectivo y a una vida mas digna, rica y frutifera para mí familia y para mí.
Hoy, antes de las: _______Am/Pm, habré realizado lo siguiente:  ___________________________      
    (Detallar).    Así es, así será. Hecho está.


Repite esta afirmación todas las veces que lo desees, preferiblemente en las mañanas. Visualiza las imágenes correspondientes en la pantalla mental. Exito. Adelante.